Las 'ayudas' a Harris en su sprint mediático: desde un teleprompter escondido hasta la post-edición de sus entrevistas
La candidata demócrata pasó la semana en el plató de numerosos medios criticados por sus coberturas favorables. Univisión y 60 Minutes son el centro de las críticas, con Trump incluso pidiendo revocar la licencia a la propietaria de este último.
Embarcados en la campaña presidencial más corta de la historia del país, el equipo de campaña de Kamala Harris anunció públicamente, desde el golpe palaciego a Joe Biden, que su misión era, simplemente, que el votante conociera a la verdadera Kamala. Eso alcanzaría, aseguraban, para transformar la imagen de uno de los vicepresidentes peor valorados de la historia, para ganar las elecciones presidenciales 2024. Sus últimas entrevistas, sin embargo, revelan un propósito ligeramente diferente: 'Conozca a Kamala, pero tampoco tanto'.
El episodio más reciente fue el jueves, cuando la candidata demócrata habló en un town hall organizado por Univisión para seducir al voto latino. La polémica estalló en la primera pregunta, cuando un trabajador de la construcción, Ramiro González (56 años), le preguntó por la respuesta de una futura Administración Harris a catástrofes naturales como los huracanes Milton o Helene. Se pudo apreciar entonces que, mientras hablaba, la candidata tenía en frente un teleprompter:
The teleprompter👀 pic.twitter.com/fIhyPzedXY
— Trump War Room (@TrumpWarRoom) October 11, 2024
Las imágenes se volvieron virales en redes sociales, y recordaron a un discurso de la vicepresidenta la semana pasada en un mitin de Michigan, cuando, congelado su teleprompter, como única solución se quedó repitiendo que faltaban 32 días para las elecciones:
¿Sin guion?
La controversia del town hall preocupa el doble en el campamento demócrata porque había prometido una seguidilla de comparecencias 'sin guion', tras semanas de evitar a la prensa. Sin embargo, el mismo anuncio del calendario de la semana pasada fue suficiente para fruncir cejos: The View, el podcast Call Her Daddy, 60 Minutes de CBS News, Howard Stern en Sirius XM y el late night de Stephen Colbert. Todos programas favorables a la demócrata.
Pero no sólo los presentadores simpatizaban con Harris -algunos abiertamente, como Stern que reconoce que votará demócrata-, sino que algunos mostraron momentos visiblemente ensayados. Como cuando Colbert la invitó a beber una cerveza y, reconociendo que había consultado antes, se burló de que Harris eligiera una Miller High Life: "Entonces con eso cubrimos Wisconsin". La cerveza se fabrica en Wisconsin, estado bisagra.
El escándalo de '60 Minutes'
Pero la entrevista más controvertida, de momento, fue ante las cámaras de 60 Minutes. O más bien, detrás: la campaña de Donald Trump exigió a CBS que emita la grabación íntegra de la conversación, acusando a la cadena de publicar una versión editada en la que faltaban respuestas que perjudicaban a la presidenciable.
Los cortes a los que se refirió Karoline Leavitt, secretaria nacional de la campaña de Trump, quien encabezó el reclamo, fueron utilizados por el medio para promocionar la entrevista. Faltaban, sin embargo, en la versión final.
A este pedido se sumaron numerosos cargos electos republicanos, entre ellos el senador Ted Cruz. "Intentaron ayudarla y les pillaron, lo que, tengo que decir, ha dañado su credibilidad de cara al futuro". En cuanto a la candidata, se preguntó: "Si ni siquiera puede hablar con un reportero amable sin necesidad de edición, ¿cómo puede representar a Estados Unidos en la escena mundial?".
"La transcripción hablará por sí sola y no hay razón para no aclarar las cosas", escribió en redes sociales el senador Lindsey Graham. "La idea de que los comentarios de Kamala Harris pueden haber sido editados de manera favorable necesita ser resuelta rápidamente".
El senador John Thune se hizo eco de las críticas, señalando que no "entendía" por qué el equipo demócrata se negaba a publicar la entrevista completa si, como afirmó tras la publicación, apoyaba todas sus respuestas. "De hecho, su negativa a unirse a estas convocatorias sólo plantea más preguntas", señaló. Una de ellas, la más repetida por los críticos: ¿qué más están escondiendo?
Trump y exempleados de CBS, contra la cadena
A estos reclamos se sumaron los de exempleados de CBS News. "Creo que debería haber una investigación externa", sostuvo uno en conversación con The New York Post. "Obviamente, aquí hay un problema. Si se preocuparan por la integridad periodística, llevarían a cabo una investigación o publicarían la transcripción completa".
Otra fuente de la llamada Tiffany Network, en conversación con el Post, sostuvo que la edición despertaba sospechas de parcialidad y pidió una "revisión exhaustiva" de lo ocurrido. Uno más recordó que había antecedentes de la cadena publicando transcripciones completas, una de ellas a Donald Trump en 2020.
El candidato republicano también exigió medidas. "La CBS debería perder su licencia, y debería ser licitada al mejor postor, al igual que todas las demás licencias de radiodifusión, porque son tan corruptas como la CBS, ¡y tal vez incluso PEOR!", publicó en X este viernes. La presidente de la Federal Communications Commission, Jessica Rosenworcel, rechazó la queja y acusó al expresidente de atentar contra la libertad de expresión.
82 días sin una conferencia de prensa
La aparición de Harris en medios amigos puede ser insuficiente para convencer a votantes indecisos. Los analistas que postulan aquella idea señalan como única solución someter a la candidata a un cara a cara con reporteros independientes o conservadores o, incluso, organizar una conferencia de prensa, donde deba hacer frente, en directo, a varias preguntas de distintos medios.
Desde que tomó el relevo de Biden, lleva 82 días sin someterse a una conferencia.