El grupo terrorista Hamás llamó a los musulmanes y palestinos a alzarse sobre la ciudad de Jerusalén al comienzo de este Ramadán. Así lo hizo Ismail Haniyeh, líder de Hamás, a través de un anuncio televisado. El llamado de la cúpula del grupo se hace a pocos días de la fecha prevista por Estados Unidos para presentar su propuesta de alto al fuego en Gaza.

El Ramadán, que este 2024 comienza el 11 de marzo, es el mes sagrado de los musulmanes. Durante esta temporada realizan sus ayunos diarios como forma de expiación. En Palestina, los rezos de esta festividad ganan especial relevancia en torno a la mezquita de Al-Aqsa. Es allí a donde Ismail Haniyeh llama a los palestinos a congregarse de forma masiva y extraordinaria el próximo 11 de marzo.

La segunda parte del plan de Hamás

El Gobierno israelí contempla con prudencia la llamada de la cúpula de Hamás, que interpreta como la siguiente fase de su plan. Teme que a lo largo del Ramadán y con la llamada a protestas masivas en Al-Aqsa, el conflicto de Gaza alcance definitivamente una fase más internacionalizada, con la intervención más marcada del Líbano e Irán.

En declaraciones recogidas por la agencia AJN, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, aseguró que Irán, Hamás y el Hezboláh libanés pretenden ejecutar "la segunda etapa del 7 de Octubre y encender la tierra".

“El principal objetivo de Hamás es tomar el Ramadán, con énfasis en el Monte del Templo y Jerusalén, y convertirlo en la segunda fase de su plan que comenzó el 7 de octubre. El principal objetivo de Hamás está siendo amplificado por Irán y Hezbollah”, aseveró Gallant.

El Gobierno dijo el lunes que permitiría las oraciones del Ramadán en la mezquita de Al-Aqsa de Jerusalén, pero que establecería límites en función de las necesidades de seguridad, preparando el escenario para posibles enfrentamientos si acuden multitudes de palestinos y la violencia en Gaza sigue haciendo estragos.

En los últimos años, la explanada de la mezquita de Al-Aqsa se ha convertido en el escenario de duros y repetidos enfrentamientos entre la población musulmana de Jerusalén y las fuerzas del orden israelíes.

Alto al fuego pasado por agua

Con estas perspectivas, cabe la posibilidad de que Hamás rechace el alto al fuego que la Administración Biden presentará próximamente. En su alocución televisada, Haniyeh aseguró que aunque está dispuesto a ser flexible en lo que concierne a las negociaciones por los rehenes en Gaza, el grupo terrorista no abandona el combate.

"La ocupación y su socio, Estados Unidos, no podrán conseguir mediante maquinaciones políticas lo que no lograron en combate. El mundo, especialmente los Estados árabes, deben contener al enemigo y negarse a que invada la ciudad de Rafah", dijo el líder político de Hamás el martes.

De acuerdo con fuentes qataríes consultadas por Reuters, aún quedan muchas cuestiones pendientes de resolverse para que todas las partes acepten el alto al fuego. El equipo de Biden se esfuerza con prometer más ayuda humanitaria para la Franja de Gaza con el fin de lograr más aceptación para su plan. En caso de recibir un rechazo, sería un sonado fracaso para la Administración Biden.