Kanye West tendrá que pagar 200.000 dólares al mes a Kim Kardashian por la manutención de sus hijos
El rapero y la estrella mediática llegan a un acuerdo de divorcio tras comenzar los trámites de separación en febrero de 2021.
Kanye West y Kim Kardashian alcanzaron el martes un acuerdo de divorcio, según aseguró la CNN citando fuentes cercanas a la pareja.
Un borrador que la cadena de televisión obtuvo en exclusiva asegura que West, que el año pasado cambio legalmente su nombre a Ye, deberá pagar 200.000 dólares al mes a Kardashian por la manutención de sus cuatro hijos: North, Santo, Chicago y Psalm. El documento también declara que ambos mantendrán la custodia compartida de los pequeños cuyas edades oscilan entre los 9 y los 3 años.
Un divorcio mediático
El matrimonio sólo duro siete años. La pareja se casó en Italia en 2014 y Kim presentó los papeles de divorcio en 2021. En ellos, la famosa empresaria argumentaba que "diferencias irreconciliables" eran el motivo principal por el que deseaban separarse. Un año después, en marzo de 2022, Kim Kardashian conseguía cambiar su estado civil a "legalmente soltera" tras conseguir la aprobación de un juez de Los Angeles.
Ese mismo mes, la revista Vogue publicaba una entrevista que Kim Kardashian les había concedido unas semanas antes. En ella, la protagonista de Keeping Up with the Kardashians explicaba algunos de los motivos por los que deseaba divorciarse de West:
La crisis matrimonial, según fueron informando los tabloides nacionales como People, Page Six y Entertainment Tonight en 2021, empeoró cuando el rapero decidió, por primera vez, presentarse a las elecciones presidenciales de 2020.
Sin embargo, la influencer defendió a su exmarido en una entrevista en televisión desvelando que él sufría trastorno de bipolaridad, lo que explicaba el comportamiento tan volátil del rapero.
West también reflexionó sobre su comportamiento y, en septiembre de este año durante una entrevista con Good Morning America, pidió disculpas públicamente a la estrella mediática: "Ella es la madre de mis hijos y me disculpo por cualquier estrés que le haya causado, incluso en mi frustración porque Dios me llama a ser más fuerte”.