Un juzgado de Colorado declaró no culpable por el homicidio involuntario de Elijah McClain al ex oficial del Departamento de Policía de Aurora, Nathan Woodyard. El agente, suspendido de empleo y sueldo por este mismo caso en el año 2020, es el último de los tres oficiales que fueron a juicio por el asesinato en 2019 del joven negro de 23 años.
Ese mismo jurado declaró culpable de homicidio por negligencia criminal al oficial Randy Roedema. Su compañero, el oficial Jason Rosenblatt, se libró de todos los cargos cuando el jurado aseguró que el agente era inocente.
Woodyard, sin embargo, se diferencia de sus colegas en que, informa CBS, decidió subirse al estrado y declarar sobre lo que ocurrió el día en que McClain murió. Según aseguró, él decidió agarrar del cuello y ahogar a McClain porque temía por su vida después de oír al joven decir: "Pienso recuperar mi poder". Una declaración que, afirmó, se agravó cuando oyó decir a otro agente: "Acaba de coger tu pistola, tío".
Otros dos paramédicos también deberán acudir al juzgado a declarar por este mismo caso. A ellos se les acusa, recuerda Reuters, de administrar a McClain ketamina, un fuerte sedante que tiende a emplearse en pacientes muy agitados.
La muerte de McClain pasó desapercibida en el año 2019. Sin embargo, un año después, la muerte de George Floyd volvió a traer el caso de McClain a los titulares. Tras unas semanas de protestas, Jared Polis, gobernador de Colorado, designó en junio de 2020 a un fiscal especial para el caso. En 2021, un gran jurado estatal acusó formalmente a los oficiales y paramédicos.
