Alerta por el colapso del mercado de la vivienda: los precios podrían caer un 20%

Moody´s alerta de que registró 183 zonas del país en las que la vivienda está sobrevalorada hasta en un 70%.

Los precios de la vivienda podrían caer hasta un 20 por ciento el próximo año si se acentúa la recesión. Mark Zandi, economista jefe de Moody's Analytics, señaló las previsiones del mercado inmobiliario para los próximos meses, que indican una caída del mercado debido a la sobrevaloración de los activos en numerosas zonas del país, según informó Fortune.

La noticia es especialmente preocupante para los propietarios de vivienda en zonas como Boise (Idaho), Charlotte (Carolina del Norte) y Austin (Texas), que fueron según Moody's Analytics las tres zonas más sobrevaloradas del país con excesos de hasta el 72%.  En total, según el análisis, 183 de los 413 mayores mercados inmobiliarios regionales del país están sobrevalorados en más de un 25 por ciento.

Entre las zonas con los inmuebles más sobrevalorados del país aparecen grandes ciudades como Los Ángeles, Orlando, Seattle o Indianápolis, donde se estima que los inmuebles están disparados en un 30%. Las viviendas de Houston están por encima de precio en un 34,5%, mientras que las de Montana lo están en un 25%.

Según el New York Post, la estimación de Moody's de que los precios caigan hasta el 20% en caso de que la recesión continúe, coincide con las estimaciones de otras agencias financieras. Fitch Ratings estimó que los precios caerán alrededor del 15% en todo el país, y el economista Robert Shiller, que predijo el colapso de la vivienda en 2008, estima un descenso de alrededor del 10%.

Las estimaciones se producen cuando el mercado de la vivienda estadounidense ha experimentado su sexto mes consecutivo de descenso de las ventas, el nivel más bajo desde 2020. Según el informe de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios, las ventas cayeron casi un 6% en julio.

Los datos coinciden con el aumento durante el último año de los tipos hipotecarios. Los compradores se enfrentan a la compra de una vivienda a un precio elevado con unos tipos altos que hacen difícil poder recuperar la inversión. El precio medio de una vivienda superó los 400.000 dólares por primera vez, al llegar a los 413.500 dólares. Todo apunta a una tormenta perfecta en el mercado inmobiliario.