Reconvertir la flota de carros de EEUU en vehículos eléctricos requeriría el triple del litio existente en la Tierra

Un estudio señala que para 2050 la producción del metal será insuficiente para cumplir los objetivos de movilidad eléctrica sólo con las necesidades estadounidenses.

Reconvertir toda la flota actual de coches, sólo de Estados Unidos, en vehículos eléctricos requeriría tres veces más litio del que el existe en la Tierra. Así lo expone un estudio, que alerta además de otros problemas a los que se enfrentaría el país como el incremento del daño medioambiental o las tensiones internacionales que se producirían ante un aumento de la demanda del mineral, que se extrae principalmente fuera de EEUU.

Ésas son las conclusiones de una investigación realizada por la Universidad de California, Davis y the Climate and Community Project.  Bajo el título Logrando cero emisiones con más movilidad y menos minería, los investigadores proponen hacer un mayor uso del transporte público, un desarrollo urbano más denso y soluciones de micromovilidad como bicicletas y patinetes eléctricos.

Reciclado de las baterías

Con estas iniciativas, y el reciclado de las baterías de litio, se conseguiría reducir la demanda del preciado metal. "Cualquiera de esos cambios sería un positivo neto, todos ellos serían transformadores", dijo Thea Riofrancos, politóloga del Providence College que trabajó en el informe.

En estos momentos, la producción mundial de litio es ligeramente superior a las 100.000 toneladas anuales. Según los investigadores, si el sistema de transporte no varía notablemente, y las baterías de los vehículos eléctricos mantuvieran el tamaño actual, tan sólo EEUU necesitaría 306.000 toneladas al año en 2050.

Investigación y aumento de producción de litio

No obstante, los científicos presentaron otros dos escenarios hipotéticos. En el peor de los casos, en el que se mantiene el actual modo de moverse y las baterías aumentan su tamaño, el consumo estadounidense podría alcanzar las 483.000 toneladas para esa fecha. En el escenario más optimista, la demanda nacional de litio podría reducirse más de un 90% respecto al escenario anterior. Para alcanzar este ideal, sería fundamental un notable incremento en el uso del transporte público, así como la sustitución de los movimientos en coches particulares en favor de andar, las bicicletas y los patinetes. También debería producirse un cambio hacia comunidades más densas, además de que una amplia mayoría de las baterías fueran recicladas al término de su vida útil.

Para afrontar estos retos, se están produciendo dos tipos de movimiento a escala global. Por un lado, la industria automovilística está invirtiendo notables cantidades de dinero en la consecución de baterías más pequeñas pero con mayor capacidad de almacenar energía. Por otro lado, se está intentando incrementar la producción mundial de litio y buscando nuevas vetas donde poder abrir nuevas minas para extraer el material.

¿Nueva mina de litio en Nevada?

En EEUU existe una única mina de litio en la actualidad, aunque la Administración Biden  ofreció el pasado mes una garantía de préstamo condicional de 700 millones de dólares para una instalación que procesaría el litio de una mina del suroeste de Nevada. No obstante, el proyecto está aún en la fase del estudio de impacto medioambiental que supondría para la zona y ya se han realizado protestas de gentes de la localidad porque es el único lugar en el que crece alforfón de Tiehm, una flor silvestre de color amarillo que el Servicio de Pesca y Vida Silvestre acaba de incluir en la lista de especies en peligro de extinción.