Protestas y enfrentamientos por la política migratoria de Eric Adams a las puertas de Gracie Mansion

Las protestas contra la actuación del alcalde de NY se extienden por la ciudad. Choques entre miembros de Antifa y manifestantes frente a la residencia del regidor.

Las protestas de los neoyorquinos preocupados por la gestión que el alcalde de la ciudad, Eric Adams, está realizando frente a la avalancha de inmigrantes irregulares que inunda la Gran Manzana terminaron en enfrentamientos violentos y varios detenidos en las puertas de Gracie Mansion, la residencia del regidor. Los choques comenzaron al encontrarse la manifestación de protesta con miembros de Antifa. Entre los detenidos se encontraba el organizador de la marcha, Curtis Sliwa. Además, se registraron concentraciones en otros puntos de la ciudad convertidos en refugios.

Nueva York, superada por las llegadas de inmigrantes

Las protestas fueron convocadas por Sliwa tras la llegada de más de 100.000 inmigrantes ilegales a la Gran Manzana como consecuencia de la política de "brazos abiertos" de la que alardeaba el alcalde antes del estallido de la crisis actual. En estos momentos, Adams ha pedido a los solicitantes de asilo de que busquen otros lugares donde refugiarse, puesto que la ciudad ha llegado a su límite para poder atender a todos los que siguen llegando. Incluso comenzó a avisar a los ilegales alojados en refugios del Ayuntamiento de que tendrán un tiempo para encontrar cobijo para hacer sitio a las nuevas llegadas.

Piden a Eric Adams que acoja inmigrantes en Gracie Mansion

Los manifestantes denunciaban que la llegada masiva de sin papeles provoca que su "seguridad está en grave peligro". Tras las últimas llegadas, cientos de inmigrantes están durmiendo en la calle, a las puertas de los refugios de la administración local. Los participantes en la protesta también criticaban las última "ocurrencias" de Adams para que los propios neoyorquinos acojan sin papeles en sus residencias e invitaban a Adams a abrirles las puertas de Gracie Mansion. Durante su intervención ante los convocados, Sliwa destacó que "no hay ninguna ley que diga que somos una ciudad santuario o un estado santuario. Fue un pronunciamiento. Fue una proclamación. Puede deshacerse instantáneamente".

Miembros de Antifa trataron de reventar la manifestación

La convocatoria terminó con varios detenidos tras presentarse varias docenas de miembros de Antifa que increparon a los manifestantes y trataron de agredirlos, lo que provocó diversos enfrentamientos que los 50 policías presentes trataron de evitar.  El periodista Andy Ngo denunció la presencia de fotógrafos de la organización de izquierda radical cuyo cometido es señalar objetivos y amedrentar. Alguno de ellos terminó también detenido por las fuerzas del orden.

Además, el domingo unas mil personas se concentraron frente a una escuela católica convertida en refugio, por lo que la policía tuvo que acordonar la zona e instalar barricadas. Se espera que las protestas continúen en los próximos días, doblando incluso el número de manifestantes.