Si la primera vuelta de la campaña electoral brasileña dejó momentos de tensión y violencia, el inicio de la segunda promete superarlo. Un juez del Tribunal Superior Electoral del país carioca ha prohibido a Lula da Silva continuar transmitiendo un vídeo que asocia a su rival, Jair Bolsonaro, con el canibalismo.
El juez Paulo de Tarso Sanseverino indica en su fallo que el anuncio difundido por el equipo de Da Silva incluye una parte "sacada de contexto". En el vídeo, de 2016, Bolsonaro, entonces diputado, explica un ritual indígena yanomami, en el estado de Roraima (norte). "El indio murió y lo estaban cocinando. Cocinan al indio; esa es su cultura. Se cocina por dos o tres días y lo comen con banana. Yo quería ver al indio siendo cocinado. Ahí me dicen: 'si lo ve, lo tiene que comer'. ¡Lo como!", indicaba en una entrevista con The New York Times.
'Fake New'
Estas declaraciones fueron aprovechadas por el equipo de Lula para lanzar un vídeo, dentro de sus espacios publicitarios reservados en televisión, que se ha hecho viral en Brasil. En él, destacaban la 'faceta caníbal' del actual mandatario. "Nosotros no inventamos nada, no es la campaña de Lula que lo dice, es él quien lo dice a un periodista estadounidense. No es malicia de nuestra parte, solo estamos dando información a la gente sobre nuestro adversario", justifican desde el Partido de los Trabajadores.
Para el TSE, "en la forma en que se tomaron estas palabras de la entrevista, se cambió el sentido original del mensaje, sugiriendo que el candidato podría admitir la posibilidad de consumir carne humana en cualquier circunstancia". El juez calificó de fake new el anuncio, por lo que procedió a prohibir su difusión.
Remontada de Bolsonaro según las encuestas
Una nueva mancha en una campaña que tiene las fake news como uno de sus principales retos. Ya durante la primera vuelta se viralizó un vídeo con Lula presuntamente borracho saludando a sus seguidores, y la semana pasada, el propio candidato tuvo que desmentir un supuesto pacto con chamanes satanistas.
Una tensión que se agrava por el hecho de que las últimas encuestas hablan casi de empate técnico entre ambos aspirantes. Según Datafolha, Lula da Silva, con un 50% de intención de voto, sigue siendo el favorito para alcanzar el sillón presidencial, pero Bolsonaro ha logrado auparse hasta una previsión del 47% de los votos. Durante los sondeos de la primera vuelta, los augurios de cara a la segunda eran de 58-38. La remontada del presidente ha levantado las alarmas entre los seguidores del expresidente y el tono de la campaña.
