Rectores universitarios de Georgia piden que se prohíba la participación de transexuales en deportes femeninos
La junta alega la "desventaja competitiva" que tendrían las mujeres al competir contra hombres. La NCAA lo permite para "preservar la inclusión".
Partido de baloncesto femenino de la NCAA
Los dirigentes de las 26 universidades públicas de Georgia aprobaron mediante votación pedir a la National Collegiate Athletic Association (NCAA) y a la National Junior College Athletic Association (NJCAA) que prohíba la participación de transexuales en competiciones femeninas.
La Junta de Rectores fue unánime en su decisión, motivada por proteger el esfuerzo y el trabajo diario que dedican las deportistas, alegando la "desventaja competitiva" que tendrían las mujeres si tuviesen que medirse a hombres.
Además, los dirigentes argumentaron su fallo con la normativa de la National Association of Intercollegiate Athletics (NAIA), que rige que únicamente pueden participar en competiciones femeninas aquellas personas que nacieron siendo mujeres, sin haberse sometido a ningún tipo de terapia hormonal ni a ninguna cirugía de cambio de sexo.
"Un estudiante-atleta trans femenino en tratamiento con medicación de supresión de testosterona para la disforia de género a efectos de competición de la NCAA podrá seguir compitiendo en un equipo masculino, pero no podrá competir en un equipo femenino sin cambiarlo a un estatus de equipo mixto hasta completar un año natural de tratamiento de supresión de testosterona", reza la política de la NAIA, que matiza que en las competiciones masculinas sí que puede participar cualquier persona.
La NCAA "preserva la inclusión"
Por ahora, la NCAA ha omitido hacer cualquier declaración o aplicar cualquier medida nueva.
Según su actual política, actualizada en mayo, la asociación lo que quiere es "preservar las oportunidades para los estudiantes-atletas transgénero al tiempo que equilibra la equidad, la inclusión y la seguridad para todos los que compiten", dando por válida la participación de hombres en competiciones femeninas.
La NCAA pide que todos "aporten documentación que cumpla con la política de la NCAA", además de "cumplir con el estándar deportivo de niveles de testosterona". Unos niveles que deben estar documentados.
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