El gobernador saliente de Carolina del Norte copia a Biden y perdona 15 penas de muerte
Los favorecidos por Roy Cooper habían sido condenados por asesinato. Uno de ellos había pedido una revisión de sentencia a la que se opuso el gobernador electo, Josh Stein.
Roy Cooper, todavía como gobernador de Carolina del Norte
Un día antes de dejar el cargo, el gobernador demócrata Roy Cooper conmutó 15 penas capitales por cadenas perpetuas en Carolina del Norte. La medida redujo las penas de muerte en el estado a 121, aunque desde el 2006 que no se ejecuta a ningún condenado.
"Estas revisiones se encuentran entre las decisiones más difíciles que puede tomar un gobernador", Cooper aseguró al anunciar los perdones. Todos los beneficiados fueron declarados culpables de homicidio en primer grado, es decir, intencionado.
Uno de los perdonados es Hasson Bacote, quien fue encontrado culpable en 2009 por el asesinato de Anthony Surles, de 18 años. Los abogados de Bacote se encontraban apelando la sentencia bajo el argumento de que su cliente había recibido la pena máxima debido a prejuicios raciales. El sucesor de Cooper en la Gobernación, Josh Stein, era entonces fiscal general del estado y, como tal, se opuso al pedido de que se impusiera una nueva sentencia, afirmando que no había pruebas de racismo.
De momento, Stein no se pronunció sobre la medida de gracia adoptada a última hora por su antecesor.
Siguiendo los pasos de Biden
Con el perdón de estas penas, Cooper imitó los perdones de Joe Biden en el último coletazo de su Administración. La semana pasada, el presidente demócrata conmutó las penas de 37 de los 40 condenados a muerte por la justicia federal.
La polémica lista de favorecidos incluye desde violadores de menores hasta asesinos. Los únicos tres condenados a muerte a nivel federal excluidos de la medida fueron uno de los terroristas que hicieron estallar bombas en el Maratón de Boston en 2013, un hombre armado que asesinó a 11 fieles judíos en 2018 y un supremacista blanco que mató a tiros a nueve feligreses negros en 2015.
El presidente electo Donald Trump criticó la decisión, asegurando que carecía de sentido:
"Cuando escuche los actos de cada uno, no podrá creer que haya hecho esto... Los familiares y amigos están aún más devastados. ¡No pueden creer que esto esté sucediendo!".
Tan sólo días antes, Biden había anunciado la concesión de clemencia para casi 1.500 reclusos condenados por penas diversas, el número más alto otorgado en un solo día. La seguidilla de perdones presidenciales comenzó con el controvertido indulto a Hunter Biden.
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