Walz llegó a decir que viajó a China "unas 30 veces", pero ahora su equipo de campaña baja la cifra a la mitad

El equipo de campaña de Tim Walz, compañero de fórmula de la vicepresidente Kamala Harris, cambia drásticamente el número de viajes que el gobernador realizó a China. Aunque Walz había afirmado en varias ocasiones haber viajado "decenas" de veces al país asiático, su equipo ahora parece estar minimizando esa cifra en medio de crecientes preocupaciones sobre los posibles vínculos de Walz con el Partido Comunista Chino.

En una audiencia del Congreso en 2016, Walz declaró haber viajado a China "decenas de veces", e incluso llegó a mencionar en un medio de comunicación que había realizado alrededor de 30 viajes. Sin embargo, un portavoz de la campaña Harris-Walz ajustó recientemente esa cifra, indicando que el gobernador había estado en China "más cerca de 15 veces".

Creciente presión y vínculos con China

El ajuste en la versión de los viajes de Walz se produce en un contexto en el que los republicanos han intensificado su escrutinio sobre sus posibles conexiones con el régimen chino. Recientemente, James Comer, presidente del Comité de Supervisión y Responsabilidad de la Cámara de Representantes y republicano por Kentucky, emitió una citación formal al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), exigiendo la entrega de registros que, según informantes, podrían contener información clave sobre las relaciones del gobernador de Minnesota con el régimen chino.

Walz ha destacado su experiencia en China como un aspecto central de su carrera política. Su primer viaje al país tuvo lugar en 1989, poco después de las protestas en la Plaza de Tiananmen, como parte de un programa educativo de Harvard. Posteriormente, organizó viajes anuales con estudiantes y, junto a su esposa, Gwen Walz, fundó una empresa dedicada a los viajes educativos. Sin embargo, esta experiencia ha adquirido una connotación delicada ahora que se postula para la vicepresidencia.

Además, su trabajo en la Universidad Politécnica de Macao, una institución con vínculos con el Partido Comunista Chino, ha suscitado más preguntas que respuestas. Los republicanos argumentan que es necesario examinar más a fondo los viajes y las relaciones de Walz con instituciones chinas, aumentando la presión sobre su campaña.

Otras controversias en su historial

El historial de Walz no solo enfrenta dudas en torno a sus viajes a China. Su servicio en la Guardia Nacional también ha sido cuestionado. Walz afirmó en 2006 que era un "sargento mayor de comando retirado", aunque informes posteriores sugieren que se retiró antes de mantener oficialmente ese rango. Exmiembros de la Guardia Nacional han señalado que Walz tiende a exagerar sus logros militares, algo que ha llevado a más críticas sobre su carácter.

Uno de sus antiguos compañeros de la Guardia lo describió en una entrevista como un "mentiroso habitual", alguien que exagera aspectos de su vida y su carrera. "Miente sobre todo. Miente sobre cosas que no tienen sentido", afirmó.