El fenómeno Trump: tres claves para sobrevivir a todos los ataques y llevar 40 puntos de ventaja en las encuestas

Trump inició una nueva era en la política americana, una nueva forma de dar discursos y acercarse a la gente.

El expresidente Donald Trump se ha convertido en un fenómeno digno de estudiar. Tanto para demócratas, como para republicanos, el comportamiento de Trump en un contexto tan complicado es llamativo. Los demócratas no entienden por qué, con múltiples acusaciones y sin siquiera ir a los debates del partido, el exmandatario tiene una ventaja de 40 puntos en las encuestas. Mientras tanto, para muchos votantes republicanos, su forma de enfrentar la situación es sorprendente y digna de admiración, pero sobre todo, es la prueba de que es el líder que necesita el país en este momento.

Hay tres asuntos fundamentales que han llevado a Trump a convertirse en tan gran fenómeno político:

Estrategia comunicativa

Trump tiene una estrategia comunicativa muy clara: un personaje fuerte, que inspira respeto y en el cual la gente puede confiar para ser protegida. Desde sus gestos, hasta sus discursos con frases de titular, todo en su comportamiento apunta a reforzar esa imagen.

“Me reuniré con Putin. Me reuniré con Zelensky. Ambos tienen debilidades y ambos tienen fortalezas. Y dentro de 24 horas esa guerra quedará resuelta. Se terminará”, dijo hace un par de meses, y en repetidas ocasiones ha afirmado que puede terminar la guerra en Ucrania en tan solo 24 horas. Esta es una estrategia comunicativa muy conocida, dar un periodo de tiempo para captar los titulares y la atención.

Para algunos es una afirmación ridícula, para otros efectivamente lo puede lograr, pero más allá de las discusiones sobre si lo puede conseguir o no, hay que resaltar que este tipo de discurso es muy efectivo si se tiene credibilidad. Esta habilidad comunicativa le ha sido extremadamente efectiva no solo para llamar la atención de los votantes, sino también en otros aspectos como en política internacional.

Trump siempre recuerda que es el primer presidente, en décadas, que no inició ninguna guerra, eso en gran medida es por cuenta de su habilidad comunicativa. Después de todo, los tiranuelos de diferentes países prefieren no comprobar si es capaz, o no, de hacer lo que dice.

De modo que, sin importar cuál es su opinión sobre el expresidente, la estrategia de comunicación de Trump es digna de estudio y ha sido completamente consistente desde que llegó a la presidencia hasta el momento. Aún en situaciones en las que para cualquiera sería imposible no mostrar algo de debilidad, él mantiene intacta la imagen de líder.

Personalidad inquebrantable

La estrategia comunicativa es algo que Trump debe haber estudiado muy bien, sus discursos siguen claramente claves de la comunicación política, pero esa imagen que transmite sería imposible de mantener si no tuviera una personalidad inquebrantable.

Los demócratas cuestionan mucho acerca de por qué millones de votantes siguen confiando en él cuando tiene múltiples acusaciones, y buena parte de la respuesta a esa pregunta tiene que ver con la actitud del expresidente frente a esos problemas judiciales. La reacción de los votantes republicanos habría sido diferente si en vez de ver a un Trump denunciando una "persecución política" y diciendo enérgicamente que puede probar que no hizo nada malo, hubieran visto a un expresidente dudoso o derrotado.

De nuevo, esto va más allá de la afiliación política, sea que le agrade o le moleste el expresidente republicano, para cualquier persona es fácil ver cómo Trump insiste aún con el mundo en contra. Los demócratas lo pueden llamar testarudo o descarado, pero los republicanos ven un heroísmo digno de admirar. No es solo que no se haya visto perjudicado por las acusaciones en su contra, sino que ha logrado voltear el panorama y sacar provecho. Después de cada nueva acusación, el apoyo en las encuestas subió.

Políticamente incorrecto

Tal vez Trump es una de las primeras personas que llega a la mente de la gente cuando se habla de lo políticamente incorrecto. De hecho Trump puso por primera vez en la mesa, a un nivel tan elevado, muchos temas de los que otros políticos a nivel internacional no se atrevían a hablar. Pero él lo lleva al extremo y su habilidad para decir cosas que otros políticos no dirían, de hecho inició una nueva era en la política americana, una nueva forma de dar discursos y acercarse a la gente.

Muchos de los discursos de Trump son casi un show de comedia, Trump no tiene reparo en burlarse de otros políticos, imitarlos, ponerles apodos, en general hacer todo un show cada que habla. Ese discurso irreverente y llamativo lo hizo conectar con mucha gente que estaba aburrida de la política, además encaja perfecto en su personaje de líder que es capaz opacar a cualquiera con solo hablar un par de minutos.

Aún más importante, esa habilidad para ser políticamente incorrecto, combinada con su estrategia comunicativa y su personalidad, le han permitido sacar adelante asuntos e impulsar temas de los que otros políticos prefieren pasar. Los temas culturales han sido clave desde que se lanzó a la presidencia y no ha tenido problema en ir contra el establishment, incluyendo el de su propio partido.

Trump es un personaje digno de estudio, su irreverencia y su coraje cambiaron la forma de hacer política, no solo localmente sino que también ha inspirado a varios líderes en el resto del mundo. En un mundo en el que la extrema izquierda avanza a niveles absolutamente destructivos -como promover operaciones de cambio de género en niños-, para muchos, la única forma de defender la libertad es votando por un líder con las características de Trump.