Ocho presuntos integrantes de una red de tráfico de personas fueron detenidos en Texas y en varias ciudades del sur del país. Los acusados transportaban a los inmigrantes por los cruces fronterizos desde México en condiciones infrahumanas, metidos en maletas, cajas de madera y camionetas, informó este martes el fiscal general adjunto de la División Penal del Departamento de Justicia, Kenneth Polite. Durante los registros, las autoridades hallaron a 12 inmigrantes en la ciudad de Laredo, incluidos dos menores.
De los ocho detenidos Erminia Serrano Piedra, alias Irma es la presunta cabecillas de la red. La mayoría de los arrestados tienen nacionalidad estadounidense, con excepción de una que es mexicana y otro que tiene doble nacionalidad, de EEUU y peruana. Los traficantes cobraban 2.500 dólares por transportar a los inmigrantes.
"Esta organización estaba motivada por la codicia personal. Piedra y sus colaboradores priorizaron esa codicia sobre la seguridad de aquellos a quienes contrabandeaban ilegalmente. Como se alega en la acusación, la organización de Piedra transportaba a personas en maletas, tanques de agua reutilizados y cajas de madera en camiones de plataforma. Amontonaron a las personas en espacios peligrosos y estrechos, con ventilación limitada a altas temperaturas, arriesgando la vida y la seguridad de las personas por dinero", detalló Polite.
Además de la exposición penal individual de los acusados las autoridades intentan confiscar el de dinero de la presunta cabecilla y dos de sus aliados por un total de más de 2 millones de dólares. “El Gobierno está tratando de confiscar las ganancias mal habidas de estos acusados, lo que incluye el decomiso criminal de tres propiedades en el área de Austin que fueron compradas con el producto de la actividad de contrabando ilegal o utilizadas para facilitar la actividad criminal de la organización”, detalla el comunicado del fiscal .
Fuerza de Tareas Conjunta Alpha
La operación fue realizada por la Fuerza de Tareas Conjunta Alpha, creada en junio de 2021 para combatir el creciente tráfico de inmigrantes. Desde su puesta en marcha detuvieron a unas 120 personas, de las cuales 50 fueron condenadas.
“El mensaje para los traficantes de personas debe ser muy claro: no se les permitirá operar con impunidad”, expresó el fiscal.
