Desde 2016, en 10 estados se han naturalizado más extranjeros que la diferencia de votos entre partidos

La Asociación Nacional para los Nuevos Americanos quiere alcanzar los 2 millones de ciudadanos al año procedentes del extranjero.

De las personas que se han naturalizado desde 2016, 5,16 millones podrán votar en noviembre. El estado donde más ha aumentado el número de nuevos ciudadanos es California, con 733.756 personas. Le siguen Florida y Nueva York, con 429.017 y 402.904 personas respectivamente, y muy cerca Texas, con 343.799. 

América es un país de acogida, capaz de asumir a inmigrantes de distinta procedencia y ofrecerles la oportunidad de progresar y formar parte de la comunidad en la que se instalen. Algunos de esos inmigrantes se quedan durante un largo período, o con vocación de permanencia, y muchos buscan ser ciudadanos de pleno derecho.

Todo ese proceso tiene consecuencias económicas, sociales y políticas. La Asociación Nacional para los Nuevos Americanos (NPNA) ha elaborado un informe para calibrar el impacto que podrá tener en las elecciones de mitad de mandato, del 8 de noviembre, la participación de casi 5,2 millones de nuevos votantes procedentes del extranjero.

"Ciudadanos de color" 

El informe no da el salto de calcular el sentido del voto de cada grupo étnico. No obstante, Nancy Flores, directora adjunta de la NPNA, señala que el origen de cada grupo étnico es muy importante. Y, en una entrevista concedida a City Limits, señala que “más del 90% de los nuevos ciudadanos son de color”. 

El informe muestra que más del 80% de los nuevos votantes proceden de América o de Asia. Pero hay una aportación significativa procedente de África, continente que aporta casi otro 10%. 

Por otro lado, el informe destaca que más de la mitad de los nuevos americanos (el 55,5%) son mujeres. Ellas son un porcentaje mayor en los tramos de más edad, mientras que en el de los 18 a 19 años son el 51,2%. Por tramos de edad, prácticamente se reparten por tercios los que tienen entre 18 y 34 años (31,7%), entre 35 y 49 (36,9%), y los mayores de 50 (32,3).

El objetivo de la asociación es lo que llaman New American Majority, que sería la confluencia de tres realidades sociales: “los jóvenes, la gente de color y las mujeres solteras”. Aunque no se explicita, el propósito es formar una coalición electoral que le otorgue una mayoría permanente al Partido Demócrata. 

Diez estados decisivos

El informe se centra en diez estados en los cuales el aumento de la población por la naturalización de extranjeros puede tener un impacto significativo en las elecciones. Esos 10 estados son Georgia, Arizona, Nevada, Pennsylvania, Florida, Carolina del Norte, Wisconsin, Texas, Michigan y Virginia. Si algunos estados, como California o Nueva York, no están en esta lista, es porque la ventaja del partido ganador (en este caso el Partido Demócrata) es tan alta que la llegada de nuevos votantes nacidos fuera no puede torcer el sentido del voto. 

Nancy Flores hace especial hincapié en Georgia. “Era un estado súper republicano, del sur, donde nunca iba a ganar un candidato demócrata”, dice, pero donde está adquiriendo una gran popularidad Stacey Abrams. Flores incide en que, por ejemplo, el número de africanos que se naturalizaron desde 2016 es mayor “que la diferencia por la cual se ganó la última elección”. La elección la ganó el candidato Biden. 

La directora del NPNA criticó a quienes exponen “la teoría del gran reemplazo”, por considerarla falsa. Y plantea que la llegada de nuevos americanos nacidos fuera y “de color” le otorgue una mayoría segura al Partido Demócrata. Así, el informe incide en que el número de nuevos mexicanos en Arizona, o de hispanos en Nevada o La Florida superan la diferencia de voto entre ambos partidos. 

El misterio hispano

El informe de manera implícita y Nancy Flores de manera explícita pecan de hacer una correlación entre nuevos votantes y votantes demócratas. El optimismo de Nancy Flores choca con la realidad del votante hispano que de forma creciente se está independizando del Partido Demócrata. La propia Flores no encuentra un motivo para ese desplazamiento hacia el Partido Republicano, que es lento pero que hasta el momento no se ha detenido. Flores se limita a decir que la mayoría es aún demócrata. Y reconoce que en La Florida, el Partido Republicano ofrece a los hispanos “servicios de ciudadanía para personas, centrándose en cubanos y venezolanos”. 

Lo cierto es que es difícil hablar en términos generales de un “voto hispano”. Más allá de la herencia cultural española, de la que el idioma es lo más destacado, hay hispanos procedentes de países distintos, con razas y religiones distintas y situaciones económicas o niveles educativos también distintos. 

A pesar de esas diferencias, hay una tendencia común: lo que era un caladero de votos inagotable y creciente para el Partido Demócrata, parece estar cambiando. En 2016, votó por Trump un 29% de los hispanos. En 2020 fue el 37%, según The Economist. Esa creciente independencia del voto hispano también ha sido observado por el medio especializado en análisis de datos FiveThirtyEight.

Uno de cada diez votantes

De acuerdo con el Pew Research Center, el 9,8% de los votantes en las elecciones de 2020 fueron americanos naturalizados, casi el doble (un aumento del 93%) que en el año 2000. Por otro lado, el 13,9% de las personas que viven en el país son inmigrantes.

Nancy Flores, en la entrevista concedida a City Limits, dice que "en un buen año" se naturalizan 600.000 a 700.000 extranjeros. "Queremos llegar a los dos millones", ha dicho.