Este jueves, Corea del Norte desplegó ocho cazas y cuatro bombarderos de su flota aérea que sobrevolaron la frontera con Corea del Sur. Los doce aviones de combate simularon maniobras de formación de ataque en un nuevo capítulo de la escalada de tensión provocada por el régimen comunista de Pyongyang.
El envío de los cazas y bombarderos sucedió horas después de que Kim Jong-un disparase dos misiles balísticos de corto alcance al Mar de Japón. Días atrás, Corea del Norte lanzó un proyectil modelo Hwasong-12 que hizo saltar las alarmas antiaéreas en dos prefecturas de Japón. Con estas prueba, Pyongyang pretende reforzar su arsenal e ignorar las sanciones de la comunidad internacional.
Respuesta de Seúl
Según las autoridades surcoreanas, la Fuerza Aérea de la República de Corea desplegó treinta aviones de combate y como respuesta al régimen comunista de Corea del Norte. También realizó, junto con Estados Unidos y Japón, maniobras navales.
Este martes, varios aviones caza surcoreanos y estadounidenses realizaron ejercicios de bombardeo de precisión sobre la isla deshabitada de Jikdo, al oeste de la península coreana, informaron las fuerzas armadas de Seúl. Estos movimientos se realizan en respuesta al disparo norcoreano de un misil balístico de alcance intermedio sobre Japón.
