Colombia: el exterrorista Petro, investido presidente entre parafernalia terrorista

La toma de posesión estuvo marcada por la presencia de simpatizantes del M-19

Gustavo Petro ha tomado posesión de su cargo como presidente de Colombia este domingo. El exterrorista del M-19 es el primer gobernante de izquierda en llegar a la Casa de Nariño. El acto se celebró en la Plaza Bolívar de Bogotá, y el gobernante fue investido por la senadora María José Pizarro, hija de Carlos Pizarro, quien fue miembro del grupo guerrillero al que perteneció Petro y fue asesinado en 1990 cuando era candidato presidencial.

La toma de posesión estuvo marcada por la presencia de banderas del grupo terrorista M-19. A los pocos minutos de haber sido investido presidente, la primera orden de Petro fue que la Casa Militar de Colombia trasladara la espada de Simón Bolívar al lugar de la ceremonia. El presidente saliente Iván Duque no aprobó el traslado, por lo que sólo fue posible realizar esta acción tras ser investido Petro. La espada fue robada en 1974, por el M-19 y  llegó a parar a manos de la familia del narcotraficante Pablo Escobar. La espada finalmente fue devuelta por el grupo terrorista en 1991 durante el gobierno de César Gaviria.

Discurso socialista

Petro lamentó que “el 10 % de la población colombiana tiene el 70% de la riqueza", y se refirió a ello como un “despropósito y una amoralidad”. “No naturalicemos la desigualdad y la pobreza. No miremos para otro lado, no seamos cómplices", añadió. "Con voluntad, políticas de redistribución y un programa de justicia, vamos a hacer una Colombia más igualitaria y con más oportunidades para todos y todas".

Petro invistió como vicepresidenta a María Márquez, la primera afroamericana en ocupar el cargo.

Entre las personalidades extranjeras que acudieron a la ceremonia se contaron el rey de España, Felipe VI; el presidente de Chile, Gabriel Boric; el de Argentina, Alberto Fernández, y el de Bolivia, Luis Arce. Los Estados Unidos enviaron una delegación encabezada por Samantha Power, administradora de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid).

Los dictadores de Cuba, Nicaragua y Venezuela no asistieron porque no fueron invitados por el presidente saliente, quien es el encargado de esa gestión.

"Si algo tiene que recibir el presidente Gustavo Petro es esa certeza de que Colombia representa democracia, confianza en la democracia (...) Ni los invitamos ni van a venir, no pueden llegar", aseveró la vicepresidenta y canciller saliente, Marta Lucía Ramírez, a la prensa local.