Así de grave está la Argentina que recibió Javier Milei: inflación de más de 100 %, caída de la actividad económica y deuda récord

Un informe de la Fundación Libertad y Progreso detalló la herencia que Alberto Fernández y Cristina Kirchner le dejaron al libertario.

Javier Milei se convirtió el 10 de diciembre en el nuevo presidente de Argentina. El libertario tomó posesión del cargo ante la mirada de funcionarios, líderes internacionales y, por supuesto, sus ciudadanos. Aprovechó su primer discurso con el bastón presidencial para aclarar punto por punto el país que recibe de manos de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, el cual no ofrece muchas ventajas.

Entre otras cosas, el primer economista en ser elegido presidente de Argentina, mencionó la inflación de tres dígitos, la pobreza de más del 40 % y la corrupción extendida en varios estamentos estatales.

"Ningún gobierno ha recibido una herencia peor que la que estamos recibiendo nosotros", expresó antes de atravesar esta herencia punto por punto. A él se sumó la Fundación Libertad y Progreso, que elaboró un informe que detalla las condiciones en las que la última administración peronista entregó el Gobierno.

“Hace 12 años que Argentina está en estanflación”

Así lo expresó Aldo Abram, director ejecutivo del think tank argentino, quien precisó además que este término se refiere a una etapa de estancamiento con creciente inflación, algo que Argentina conoce desde el año 2011.

En cuando al aumento de precios, Fernández le entregó a Milei un país encaminado al 142 % de inflación anual y con una inflación acumulada de 813 % desde que el peronista asumiera su cargo.

Inflación en Argentina por presidente
Inflación acumulada por presidente en Argentina. (Libertad y Progreso)

A su vez, encontraron que, desde diciembre del 2019 a diciembre del 2023, bienes como el azúcar, la papa y la naranja experimentaron una inflación de más del 1.500 %, por supuesto mucho más de lo que aumentaron los salarios.

La persistente falta de conducta fiscal junto a la acumulación de deuda producto del sostenimiento de un Estado cada vez más grande en la economía, trajeron consigo muchas dificultades para lograr políticas económicas que sean estables. A su vez, la mayor intervención estatal, con controles de precios y restricciones a las exportaciones, han generado severas distorsiones para el funcionamiento del mercado argentino y contrajeron aún más la producción. La aceleración inflacionaria en los últimos años afectó el poder adquisitivo de la población y creó incertidumbre en la economía afectando la falta de inversión y la confianza empresarial”, señaló Eugenio Marí, economista jefe de Libertad y Progreso, en exclusiva con Voz Media.

¿La actividad económica? Estancada

El informe también detalló que la actividad económica de Argentina, entendida como la producción de bienes y servicios de una economía, osciló entre los mismos niveles durante los últimos 12 años.

Valentín Gutierrez, analista de la fundación, resaltó también que estos números se dan en el marco de un crecimiento sostenido de la población (13,1 %). En otras palabras, "la torta" sigue siendo la misma, pero ahora para repartir entre más personas, lo que llevó a una disminución del ingreso por habitante.

Deuda récord

Por último, el informe mostró que la deuda pública del Tesoro Nacional había subido a 419.291 millones de dólares, alcanzando su máximo histórico. Durante la gestión de Alberto Fernández, el aumento total de la deuda pública fue del 33,8 % .

“El aumento del endeudamiento también ha sido récord histórico. En los 46 meses de la gestión de Alberto Fernández la deuda bruta subió US$106 mil millones. Más de un tercio de la suba, unos US$38.517 millones (36% del total), se dio durante la gestión del actual ministro Sergio Massa. Si además sumamos el juicio por la estatización de YPF, por unos 16.000 millones, entonces el incremento de la deuda llega a unos 122 mil millones”, añadieron.

Por su parte, cuando se analiza la composición del endeudamiento del Tesoro se observa que el 64% es en moneda extranjera (81% en dólares, euros, 16% en Derechos Especiales de Giro y el restante 3% en otras monedas) y solo el 36% es pagadera en pesos. Y de ese 36 % en pesos, el 58 % posee cláusulas de ajuste por precios o tipo de cambio.