Trump no podrá hablar en público sobre "material sensible" del caso del 6 de enero. La jueza del caso, Tanya Chutkan, emitió una orden el viernes tras oír argumentos del Departamento de Justicia y los abogados del expresidente.
El límite establecido por la magistrada sólo involucra información o documentos relacionados con el proceso de descubrimiento o "discovery". El equipo del fiscal especial Jack Smith determinará qué es información "sensible", siguiendo la guía establecida en la orden - como que se podrá incluir testimonios de testigos y materiales obtenidos de otras entidades gubernamentales-.
La jueza también prohibió que cualquier persona no vinculada directamente con el caso pudiese revisar aquella evidencia, y en caso de que alguien, como un testigo, debiese acceder, tendrá que comprometerse por escrito a callar lo aprendido.
También dedica previsiones específicamente para Trump. Podrá revisar la evidencia sin necesidad de que lo acompañen sus abogados, pero si toma notas, sus representantes legales deberán revisarlas. Cuando examine el material sin tutelaje, Trump no podrá contar con "acceso a ningún dispositivo capaz de fotocopiar, grabar o de cualquier otro modo replicar" la documentación. Incluyendo su teléfono móvil.
Más allá de la orden, la jueza advirtió que estará atenta a si las palabras de Trump obstruyen de alguna manera el proceso o intimidan a testigos. Asimismo, sostuvo que el también candidato debía distinguir entre su defensa en los tribunales y en la campaña, evitando referirse al "material sensible" si algún candidato le criticaba por su supuesto papel el 6 de enero.
"Los juicios no son como las elecciones, que se ganan utilizando la sala de reuniones, la radio y el periódico", dijo en una sesión con ambas partes antes de la decisión el pasado viernes, en declaraciones recogidas por CNN. "Este caso no es una excepción".
De acuerdo con el mismo medio, Chutkan avisó que si se pronunciaran dichos "incendiarios", se vería obligada a avanzar lo más rápido posible hacia un juicio para garantizar un jurado imparcial.
Chutkan cedió así parcialmente al pedido del Departamento de Justicia después de que Trump prometiera revancha contra quienes iniciaron una, en sus palabras, "caza de brujas". Queda ver cómo resuelve otro pedido de Jack Smith: comenzar el juicio el 2 de enero de 2024.
UNITED STATES OF AMERICA v. DONALD J. TRUMP by Santiago Adolfo Ospital on Scribd
