El desertor Travis King sale en libertad tras ser condenado a un año de prisión, el tiempo que ya cumplió tras las rejas
El soldado que cruzó la frontera de las dos Coreas se declaró culpable de cinco cargos, incluyendo deserción y desobediencia.
El desertor Travis King fue condenado este viernes a un año de prisión por huir a Corea del Norte. Teniendo en cuenta su tiempo tras las rejas en Corea del Norte y su "buena conducta", según su abogado, King pudo salir en libertad.
Franklin D. Rosenblatt, su representante legal, explicó que el soldado de 24 años se declaró culpable de cinco cargos frente a un corte marcial en Fort Bliss, Texas: uno por deserción, tres por desobediencia y otro más por agresión a un suboficial.
Como parte del acuerdo, el joven de Wisconsin también fue degradado y recibió una baja deshonrosa.
El soldado desertó el año pasado cuando se encontraba prestando servicio en Corea del Sur, cruzando la frontera a Corea del Norte y, según el régimen norcoreano, pidiendo asilo. King escapó antes de abordar un avión con destino a Texas donde iba a ser juzgado por la jerarquía militar tras haber pasado 48 días en una prisión coreana por patear un coche de la Policía. Su deportación a Estados Unidos se concretó en septiembre.
Rosenblatt sostuvo que el desertor se había enfrentado a "importantes retos", "como una educación difícil, la exposición a entornos delictivos y problemas de salud mental", que habían sido agravados por las "dificultades" que se encontró en el cumplimento del servicio militar. En su defensa, el abogado habló de episodios de racismo y problemas de adaptación.
Apuntó, además, que aunque haya aceptado su culpa frente al tribunal, "la percepción pública negativa y las consecuencias vigentes de sus actos, junto con el confinamiento al que se ha visto sometido, representan un castigo permanente que Travis King sufrirá el resto de su vida".