California estudia la descriminalización de la posesión y consumo de alucinógenos de origen vegetal
Un proyecto de ley presentado en el Senado estatal defiende el uso de psicodélicos para el tratamiento de adicciones o trastornos como la depresión o la ansiedad.
El Senado de California estudiará un proyecto de ley que pretende descriminalizar (no legalizar) la posesión y consumo de psicodélicos de origen vegetal. La norma cuenta con el respaldo de profesionales de la salud mental y de veteranos, y pretende ayudar al tratamiento de las adicciones y a trastornos como la ansiedad o la depresión. La propuesta parte con el rechazo de las fuerzas del orden, preocupadas por los posibles riesgos para la seguridad pública causados por personas bajo los efectos de sustancias alucinógenas.
El impulsor de la norma, el senador estatal Scott Wiener, señaló en un comunicado que "los psicodélicos tienen una capacidad tremenda para ayudar a la gente a curarse; pero ahora mismo, consumirlos es un delito penal. Estas drogas salvan literalmente vidas y son algunos de los tratamientos más prometedores que tenemos para el TEPT, la ansiedad, la depresión y la adicción".
Rechazo de una versión anterior
Se trata de la segunda vez que Wiener introduce esta propuesta en el Senado californiano. Hace cuatro meses, una versión anterior fue rechazada en un comité clave de la Asamblea estatal entre la oposición de las fuerzas del orden y de un grupo de demócratas, que se unieron a los republicanos para votar en contra. En el nuevo proyecto, Wiener ha excluido los psicodélicos sintéticos, como el LSD y el MDMA, (éxtasis), que aparecían en el proyecto anterior.
En esa ocasión, la Asociación de Fiscales de California se opuso a la aprobación de la norma: "Sin más pruebas de que estas drogas alucinógenas no son más peligrosas que el cannabis, no podemos apoyar su legalización. Las alucinaciones pueden ser peligrosas tanto para los consumidores como para los transeúntes, y no está claro que el beneficio de legalizar estas drogas supere el coste para el bienestar común".
Rechazo de las fuerzas del orden
El proyecto de ley SB 58 sólo permitiría los alucinógenos de origen vegetal, como la psilocibina, el ingrediente activo de las "setas mágicas", y la dimetiltriptamina, o DMT, que se encuentra en algunas plantas utilizadas para elaborar la ayahuasca. Otros psicodélicos naturales que se permitirían en virtud del proyecto de ley son la ibogaína, un alcaloide psicoactivo que se encuentra en el arbusto de la iboga, y la mescalina, que se encuentra en cactus distintos del peyote.
Además, de aprobarse, no se autorizaría la venta de estos psicodélicos en dispensarios -ni en cualquier establecimiento-. De entrar en vigor, la policía no podría arrestar a personas por posesión o uso personal de cantidades limitadas de los alucinógenos señalados. De hecho, únicamente eliminaría la sanción penal por posesión o consumo personal de pequeñas cantidades y seguiría prohibiendo la venta de estas drogas a menores.