Steve Bannon, antiguo asesor de Donald Trump durante los primeros meses en la Casa Blanca, se entregó en la prisión federal de Danbury para cumplir con sus cuatro meses tras las rejas. El también estratega político fue condenado por desacato tras no cumplir con una citación del Congreso para declarar sobre los acontecimientos del 6 de Enero del 2021. 

Previo a entregarse, Bannon se subió a un podio frente a algunos seguidores que lo acompañaron para condenar a la Administración Biden y particularmente al Departamento de Justicia, dirigido por Merrick Garland. 

"Tengo derecho a la Primera Enmienda. En primer lugar, tengo derecho a que se oiga mi voz. Y mi voz va a ser escuchada todos los días, y lo que es más importante, sus voces van a ser escuchadas", expresó, acompañado por los congresistas Matt Gaetz (R-FL) y Marjorie Taylor Greene (R-GA). 

"Estoy orgulloso de ir a la cárcel. Y esto es lo que hace falta para plantar cara a la tiranía. Esto es lo que hace falta para plantar cara al corrupto y criminal Departamento de Justicia de Garland. Esto es lo que hace falta para plantar cara a Nancy Pelosi. Esto es lo que se necesita para hacer frente a Joe Biden. Estoy orgulloso de hacerlo", sumó Bannon. 

El estratega político se convirtió así en el segundo exasesor de Trump en ir a prisión por desacato tras Peter Navarro, quien hizo lo propio a inicios del 2024 por la misma causa: negarse a la citación del comité de la Cámara de Representantes que investigó lo sucedido el 6 de Enero de 2021, cuando simpatizantes del expresidente invadieron el Capitolio. 

"No necesitan mi voz. Somos un movimiento populista. Somos un movimiento populista. Cuando digo: 'El siguiente hombre arriba', no se trata solo de nuestros otros anfitriones. No son sólo los congresistas [Marjorie Taylor Greene (R-GA)] y Matt Gaetz (R-FL) y toda la gente que apoya el programa. Es toda esa gente", añadió.", continuó Bannon.

Bannon intentó previamente dilatar el cumplimiento de la sentencia, pero su petición fue rechazada tanto por tribunales inferiores como por la Corte Suprema de Justicia (SCOTUS). 

Dada la duración de la sentencia, cuatro meses, permanecerá en prisión hasta cinco días antes de las elecciones presidenciales que por ahora enfrentarán a Donald Trump y a Joe Biden. 

El republicano se mantuvo muy activo en las semanas previas a su ingreso a la prisión. Continuó con su podcast rutinariamente e incluso prometió que iba a ser más poderoso estando tras las rejas. 

Por último, y en cuanto a su nueva residencia para los próximos cuatro meses, Danbury es una instalación de baja seguridad ubicada en el estado de Connecticut, donde alberga a unos 1.200 reclusos entre hombres y mujeres. 

Allí se aloja una mayoría de delincuentes de guante blanco, aunque también hay convictos por crímenes violentos y delitos sexuales. En cuanto a las facilidades de los reclusos, tienen acceso a un correo electrónico y cientos de minutos telefónicos al mes, aunque sin opción de renovación.