La presidente de la Comisión Europea de la UE, Von der Leyen, llega a Uruguay para concretar un polémico tratado comercial que Francia quiere evitar
El parlamento francés recientemente debatió sobre el acuerdo con Mercosur y votó en su contra, en un intento por frenar su avance.
Ursula von der Leyen, presidente de la Comisión Europea, y Maroš Šefčovič, comisario de Comercio, arribaron este jueves a Uruguay con el objetivo de concluir las negociaciones del ambicioso y polémico acuerdo comercial entre la Unión Europea y el bloque Mercosur.
En un mensaje publicado en sus redes sociales, Von der Leyen expresó: “Aterrizaje en América Latina. La línea de meta del acuerdo UE-Mercosur está a la vista. Trabajemos, cruzémosla”. Además, destacó que el pacto busca conectar un mercado de 700 millones de personas, describiéndolo como "la mayor asociación comercial y de inversión que el mundo haya visto jamás".
Avances en Uruguay pese a tensiones políticas
Tras varios años de negociaciones, este acuerdo comercial pretende fortalecer las relaciones entre la UE y Mercosur, compuesto por Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia. No obstante, el trayecto hacia la cumbre de Montevideo se ha visto entorpecido por tensiones políticas y críticas internas en Europa.
En Francia, la oposición al acuerdo ha sido contundente, motivada por preocupaciones sobre su impacto ambiental y en sectores agrícolas clave. La semana pasada, el parlamento francés votó en contra del acuerdo, reflejando un consenso unificado en París para bloquear su avance. Sin embargo, el reciente colapso del Gobierno de Michel Barnier dejó al país sin una posición firme en este proceso, despejando el camino para la continuidad de las negociaciones.
Por otro lado, Alemania ha incrementado la presión para que el acuerdo se concrete. La ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, ha subrayado la importancia del pacto para consolidar la competitividad económica de la UE frente a otras potencias globales. Berlín considera este acuerdo esencial para el futuro del comercio europeo en un contexto internacional cada vez más competitivo.
Implicaciones para la UE
El enfrentamiento entre Francia y Alemania pone de relieve las tensiones internas sobre la estrategia comercial del bloque. Si las divisiones entre los dos principales motores de la UE se profundizan, podrían cuestionar el papel de la Comisión Europea como negociador principal en acuerdos internacionales y afectar la cohesión del mercado único, que engloba a 450 millones de personas.
Von der Leyen enfrenta ahora el desafío de equilibrar las demandas de los estados miembros mientras intenta sellar un acuerdo con América Latina. La cumbre en Uruguay será decisiva para determinar si este ambicioso y polémico pacto comercial logra cruzar la línea de meta o enfrenta nuevos retrasos.