Un ataque de los hutíes en el mar Rojo deja al menos tres muertos
El granelero fue impactado por varios misiles el miércoles. Es el primer ataque con víctimas mortales desde que el grupo terrorista empezó a apuntar contra embarcaciones en la zona el pasado noviembre.
(AFP / VOZ MEDIA) Un misil disparado por los rebeldes hutíes de Yemen golpeó el miércoles un buque granelero en el golfo de Adén y dejó tres muertos y al menos cuatro heridos, según declaraciones de la tripulación informadas por el ejército estadounidense.
Los rebeldes hutíes, apoyados por Irán, atacan desde noviembre barcos comerciales que navegan por el mar Rojo y por el golfo de Adén, y que consideran vinculados a Israel. El movimiento proiraní dice actuar en solidaridad con los palestinos de la Franja de Gaza, escenario de una guerra entre Israel y el movimiento islamista Hamás.
Los tripulantes fallecidos este miércoles serían las primeras víctimas mortales de estas acciones. Dos de ellos eran marineros filipinos, dijo el jueves el gobierno de este país del sureste asiático. Otros dos tripulantes de esa nacionalidad resultaron "gravemente heridos" por el ataque, agregó.
Un misil balístico antibuque impactó contra el M/V True Confidence, de bandera de Barbados y propiedad liberiana. Su tripulación informó de "tres víctimas mortales, al menos cuatro heridos, de los cuales tres están en estado crítico, y daños significativos en el buque", declaró el Mando Central de Estados Unidos (Centcom) en un comunicado.
"La tripulación abandonó el barco y los buques de guerra de la coalición respondieron y están evaluando la situación", dijo el mando militar, señalando que se trataba de la quinta vez que los hutíes lanzaban un misil balístico antibuque en dos días. "Estos temerarios ataques de los hutíes perturbaron el comercio mundial y se cobraron la vida de navegantes internacionales", añadió el Centcom.
En un comunicado en redes sociales, el portavoz militar hutí Yahya Saree afirmó que el True Confidence fue alcanzado por "misiles" después de que "la tripulación rechazara los mensajes de advertencia", provocando un "incendio".
La embajada británica en Saná describió la pérdida de vidas como "la triste pero inevitable consecuencia de que los hutíes disparen temerariamente misiles contra la navegación internacional". "Seguiremos defendiendo la libertad de navegación y respaldaremos nuestras palabras con hechos", prometió el ministro de Relaciones Exteriores británico, David Cameron.
A raíz de los ataques hutíes, Estados Unidos puso en marcha una fuerza multinacional de protección marítima y ha llevado a cabo, a veces con la ayuda del Reino Unido, bombardeos contra posiciones de los rebeldes en Yemen. "Seguiremos exigiendo que rindan cuentas. Pedimos a los gobiernos de todo el mundo que hagan lo mismo", había declarado por su parte el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller.