Piedras salteadas: el plato más duro del mundo con rocas sazonadas está triunfando como comida callejera en China

El nuevo plato de comida callejera que está a la moda en China se está haciendo viral en las redes sociales debido a lo particular que es su ingrediente principal, piedra.

El plato apodado como “el más duro del mundo” se llama soudui (chupar y tirar, en español) y la versión que venden los vendedores de comida callejera en China consiste en saltear las pequeñas piedras con una variedad de verduras y especias como ajo, chile, romero y aceite.

Los comensales pagan alrededor de 2 dólares por una porción y tal y como el nombre del plato lo indica, solo deben chupar las piedras para saborearlas y luego desecharlas.

Origen del plato

Varios reportes indican que el plato se pudo haber originado hace siglos en la provincia central de por la escasez de alimentos que sufrían los barqueros chinos cuando se quedaran varados en medio de un río de la provincia, recurriendo así a los guijarros como forma de alimento.

¿Hay que regresar las piedras?

Una de las principales preguntas que surgen sobre el soudui es si una vez que el cliente se termina de chupar todas las piedras, estas deben ser regresadas al local de comida. Sin embargo, una vez que se paga el plato todos los ingredientes pasan a ser propiedad del comensal por lo que los cocineros suelen responder que se las pueden quedar de recuerdo.

Un plato tan popular como el alcohol

Un chef callejero fue grabado mientras preparaba el famoso plato que está capturando la atención internacional y este afirmó que el soudui sea convertido en una opción de comida tan popular como el licor y aunque no está claro si es esto es cierto, cada vez son más los creadores de contenido que hablan en las redes sociales sobre este plato. De hecho, las plataformas chinas Xiaohongshu y Weibo están repletas con videos de personas que cocinan o prueban el plato.

Chistes sobre el plato

Algunos usuarios en las redes sociales han sacado memes y bromas sobre el plato callejero, destacando los problemas dentales que podría causar si por error se muerde alguna de las piedras, la creatividad de los chefs e incluso el peligro que podría significar tragarse uno de los guijarros.