HA MUERTO PELÉ, leyenda del fútbol mundial

Son pocos los futbolistas que tienen el privilegio de ser recordados por varias generaciones, cuyos nombres perduran con el paso de los decenios. Maradona, Cruyff, Di Stefano, Messi, Cristiano Ronaldo... y Pelé. Algunos no tuvimos la suerte de ver jugar al hombre que cambió el panorama futbolístico de Brasil –uno de los países con mayor tradición de este deporte–, pero, aun así, no se nos escapará su nombre a la hora de mencionar a los mejores jugadores de la historia. Un jugador que se ganó el respeto y la admiración de todos a base de talento, alegría y goles.

Pelé murió este jueves a los 82 años en el hospital Albert Einstein de Sao Paulo tras luchar contra un cáncer de colón que le fue diagnosticado en septiembre de 2021. Su característica sonrisa era un fiel reflejo de lo que transmitía dentro y fuera del terreno de juego.

Tras conquistar los Mundiales de 1958 y 1962, Pelé logró coronarse como O Rei y situarse en el Olimpo futbolístico. Con 1.284 goles en los 1.351 partidos que disputó, es uno de los grandes goleadores de todos los tiempos.

Sus inicios

Edson Arantes do Nascimento nació en Três Corações, una ciudad situada en el sur del estado de Minas Gerais. Su padre era futbolista, pero su carrera se vio truncada por una grave lesión en la rodilla en su debut profesional.

La familia se mudó a Bauru, en Sao Paulo. Fue ahí donde Pelé comenzó a jugar al fútbol en un equipo modesto mientras trabajaba en una fábrica de zapatos. Tras ganar el trofeo local, Waldemar de Brito, exfutbolista profesional, vio su potencial y le recomendó irse a la capital para jugar en el Santos Fútbol Club. Pese a la reticencia de sus padres, finalmente accedieron a que su hijo cumpliese su sueño.

Carrera prodigiosa en el Santos

O Rei estuvo ligado al Santos durante 19 temporadas, prácticamente toda su carrera profesional. Pelé ingresó en las categorías inferiores y jugó su primer partido con el primer equipo en 1956, con tan solo 16 años, ante el Corinthians, en un partido amistoso. En su primer partido como futbolista profesional, anotó un gol y fue el punto de partida de la carrera de uno de los mejores futbolistas de la historia.

El 26 de abril de 1957 jugó su primer partido profesional frente al São Paulo (uno de los grandes derbis de Brasil, conocido como San-São), y anotó uno de los 3 goles que le dieron la victoria a su equipo. En su primera temporada, con 17 años, marcó 41 goles en 38 partidos y fue el máximo anotador de la liga brasileña. El 7 de julio hizo su debut con la selección brasileña en un partido frente a Argentina en el estadio de Maracaná.

En la siguiente campaña, Pelé amplió su cuenta goleadora: en 38 partidos, marcó 58 tantos. Su nombre ya comenzaba a sonar no solo en Brasil, también en el resto del planeta. Tras su excelente temporada, el seleccionador de Brasil, Vicente Feola, le dio la oportunidad de jugar su primera Copa del Mundo, que acabaría conquistando la Canarinha.

Su mayor registro goleador lo consiguió en 1961: 110 goles en 74 partidos. Una cifra impensable y, posiblemente, inalcanzable para cualquier jugador de la era contemporánea.

La Perla Negra –como también era conocido– consiguió mantener unos datos goleadores espectaculares durante el resto de su carrera en el Santos: no bajaba de los 30 goles por campaña. Hasta su última temporada, cuando comenzó su declive y solo marcó 14 tantos. Con el Santos, ganó 6 ligas brasileñas, 2 copas Intercontinentales y 2 Libertadores.

Tres Mundiales

Brillante fue su participación en la selección de Brasil. La Canarinha se presentó en la Copa Mundial de 1958 celebrado en Suecia tras sufrir, ocho años atrás, el mayor batacazo de su historia, el Maracanazo -Brasil acogió el Mundial de 1950 y perdió en la final por 2-1 frente a Uruguay-. Aquel evento fue un punto y aparte en la historia futbolística de la Verdeamarela.

Una nueva generación, liderada por el propio Pelé y Garrincha, acudió al torneo en el país europeo con un espíritu diferente al resto de selecciones. Brasil acabó venciendo la final al equipo anfitrión por 5-2, con dos goles de O Rei, y colocó su primera estrella mundialista encima de su escudo.

La siguiente edición del Mundial, celebrado en Chile en 1962, Pelé volvía a ser la insignia de la selección brasileña y, de nuevo, la Verdeamarela se coronaba campeona del mundo. La final acabó con un marcador de 3-1 frente a Checoslovaquia.

En el Mundial de Inglaterra de 1966, Brasil decepcionó y cayó en la frase de grupos. Cuando parecía que comenzaba la decadencia de Pelé y de la selección brasileña, la Canarinha resurgió y ganó la siguiente edición de la Copa Mundial, celebrado en México en 1970. En aquella final, Pelé abrió el marcador de la goleada anotada contra Italia (4-1).

En total, marcó 95 goles en 112 partidos con la Verdeamarela y ganó tres Mundiales.

Retirada y regreso

En octubre de 1974, Pelé anunció su retirada del fútbol. Pero no acabaría ahí. Tras pasar dificultades económicas, O Rei encontró la manera de paliar su situación financiera volviendo a los terrenos de juego. Recibió numerosas ofertas de grandes equipos como el Real Madrid o el Milán, pero se decantó por volar a la Gran Manzana y emprender su siguiente aventura en el Cosmos de Nueva York.

Durante su periplo por tierras estadounidenses, Pelé ganó una NASL (North American Soccer League), la precursora a la actual MLS (Major League Soccer). En tres temporadas, anotó 64 goles en 108 partidos.

Logros individuales

Aparte de ganar en numerosas ocasiones el premio de "máximo goleador" y de "mejor jugador" en las competiciones nacionales de Brasil, Pelé recibió prestigiosos galardones durante toda su vida: Equipo mundial del siglo XX en 1998, Mejor jugador del siglo XX según la IFFHS (Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol) en 1999, Mejor jugador sudamericano del siglo XX según la IFFHS en 1999, Jugador del siglo de la FIFA en el año 2000, el Premio Laureus en el año 2000 o el Golden Foot Leyenda en el año 2012, entre otros. Además, recibió la Orden Olímpica en 2016, la condecoración más importante concedida por el Comité Olímpico Internacional (COI). En 2011, ingresó en el Salón de la Fama del Fútbol Mundial.

Durante su trayectoria, hubo un premio que no consiguió: el Balón de Oro. En su época, los jugadores no europeos o europeos que jugaban en ligas que no pertenecen al viejo continente no podían aspirar al galardón más importante a título individual del fútbol. Tras la rectificación de la normativa por parte de la FIFA, Pelé ganó el Balón de Oro honorífico en el año 2014 y fue uno de los elegidos del Once Histórico del Balón de Oro en 2020.

En el año 2000, quedó por detrás de Mohamed Alí como Deportista del Siglo.

Su vida después del fútbol

Tras su retirada definitiva, Naciones Unidas le nombró su embajador en 1997 y le concedieron el galardón de Ciudadano del Mundo. Además, ese mismo año, ingresó en el Comité de Juego Limpio de la FIFA y fue embajador de la Unesco.

Tres años antes, el club de su vida, el Santos, nombró a Pelé como su asesor ejecutivo. En 1994, el expresidente brasileño Fernando Henrique Cardoso le designó ministro de Deportes. Durante su aventura en primera línea política, promulgó la Ley Pelé, con la que un club debía renovar a un jugador o darle la carta de libertad en caso de no querer ampliar su contrato.

También dejo su sello en el cine. Apareció, junto con otros futbolistas como Bobby Moore, en la película Evasión o victoria de 1981, protagonizada por Sylvester Stallone y Michael Caine.