Ford y General Motors tomaron acciones severas después de que la UAW decidiese aumentar los parones que están llevando a cabo en varias de sus fábricas. Ambas compañías despidieron a cerca de 500 trabajadores.
En concreto, informó CNN, Ford prescindió de 330 personas en la planta de estampado de Chicago así como en su planta de motores de Lima. La decisión se tomó después de que la fábrica de Chicago, encargada de fabricar los SUV Ford Explorer y Lincoln Aviator, se uniese al parón que ya ha provocado que 2.000 trabajadores de las plantas en huelga perdiesen su empleo. Decisiones que, aseguró la compañía en un comunicado, se tomaron debido a que todas las plantas están "interconectadas" entre sí:
Nuestro sistema de producción está altamente interconectado, lo que significa que la estrategia de huelga selectiva del UAW tiene efectos en cadena para las instalaciones que no son el objetivo directo de un paro laboral.
General Motors despide a 164 empleados
Por su parte, General Motors prescindió de 164 trabajadores en las plantas de estampado que tienen situadas en Parma (Ohio) y Marion (Indiana). Según destacó la empresa en un comunicado, estas fábricas se ocupan de enviar piezas metálicas estampadas a las instalaciones de Wentzville (Ohio) y Lansing Delta Assembly (Michigan), plantas que también están actualmente en huelga y que se ocupan de fabricar las camionetas Chevrolet Colorado y GMC Canyon así como Chevy Traverse y Buick Enclave:
La decisión de la dirección de la UAW de convocar una huelga en GM Wentzville Assembly, y ahora en GM Lansing Delta Township Assembly, sigue teniendo repercusiones negativas.
Además, el portavoz de la compañía, David Barnas, aseguró en declaraciones recogidas por Detroit Free Press que ninguno de los empleados que perdió su empleo debido a la huelga de la UAW (y que ronda aproximadamente las 2.000 personas) podrá recuperarlo hasta que terminen los piquetes:
No se espera que los miembros del equipo afectados regresen hasta que se haya resuelto la huelga. Dado que estamos trabajando en virtud de un convenio laboral que ha expirado, no hay disposiciones que prevean el pago de subvenciones por parte de la empresa en estas circunstancias. Hemos dicho en repetidas ocasiones que nadie gana en una huelga, y esta es otra demostración de ello. Seguiremos negociando de buena fe con el sindicato para llegar a un acuerdo lo antes posible.
