La liberación de los hispanos

Las últimas dos legislaturas presidenciales han hecho que los hispanos se liberen y rompan las cadenas que mantenían su voto cautivo del Partido Demócrata. Un proceso que comenzó con el mandato de Donald Trump y que se ha acelerado notablemente durante la Administración Biden-Harris, cuya gestión ha castigado especialmente a los latinos, hasta el punto de que algunas encuestas apuntan incluso una histórica victoria de los conservadores entre los miembros de esta comunidad. 

Pese a las advertencias de algunos legisladores del Partido Azul, sus líderes confían en que los hispanos acabarán votando por Kamala Harris o quedándose en casa, por lo que continúan más centrados en movilizar a los votantes negros que en volver a conquistar al segundo grupo racial en número del país. 

El error histórico del Partido Demócrata con los hispanos

Algo que apunta a error histórico, de acuerdo con los datos del Censo. La población hispana es, con diferencia, la que más ha crecido (el 71% del crecimiento total de los residentes en el país en 2023 provino de familias latinas), y la que presenta una mayor tendencia a seguir haciéndolo en los próximos años. En noviembre, los hispanos llamados a las urnas alcanzan los 36 millones, el 14,7% del total de los votantes. El número de miembros de esta comunidad creció hasta los 65 millones, prácticamente una quinta parte de los habitantes de EEUU (19,5%).

De hecho, los hispanos ya son el grupo racial de votantes mayoritario en Nuevo México. Hasta el 45% de los llamados a las urnas son latinos en la Tierra del Encanto. Los estados con mayor número de residentes de este grupo demográfico son California (15.760.437), Texas (12.135.690), Florida (6.197.465) y Nueva York (3.873.130).

Los hispanos, los más descontentos con la Administración Biden-Harris

Lejos de ver estas cifras, Tanto Joe Biden al comienzo de campaña como Kamala Harris tras su golpe contra el presidente han dejado de lado a una comunidad muy perjudicada por sus medidas económicas y absolutamente contraria a su política migratoria. Encuesta tras encuesta, los votantes latinos han reiterado como sus máximas preocupaciones la inflación, la economía y la crisis fronteriza.

Esto se ha reflejado en el apoyo de una comunidad que tradicionalmente venía votando abrumadoramente por el Partido Demócrata y que, según alguna de las últimas encuestas, podría incluso votar mayoritariamente por los conservadores. Con la excepción de 2004, los candidatos del Partido Azul venían contando con una ventaja de unos 35 puntos entre los latinos sobre sus oponentes conservadores, hasta 2020. Biden vio como, tras el mandato de Trump, esta diferencia se reducía a 23 puntos (un 12% por debajo). 

Kamala Harris, la candidata demócrata con menos apoyo hispano

Con Kamala al frente, la situación sólo ha ido a peor. Los pronósticos más optimistas le dan un margen de victoria de 18 puntos entre los hispanos (Pew Research Center), mientras que los últimos sondeos de la Universidad de Quinnipiac ponen entre seis y diez puntos por delante a Trump, un hito más que notable.

Hay, además, un dato que debería preocupar más a los demócratas: los votantes hispanos jóvenes están girando notablemente su posición hacia los conservadores, lo que presenta un futuro complicado para el Partido Azul si no deja su complacencia y comienza a trabajar por volver a enamorar al electorado latino más allá de fiarlo todo al apoyo de las mujeres de esta comunidad a su postura sobre el aborto.

Por último, una encuesta de la NBC dejaba otra bomba a la línea de flotación demócrata. Entre 2022 y 2024, un 8% de los hispanos ha dejado de considerar al Partido Azul como el que mejor representa sus valores. Hace dos años, el 47% de los latinos se sentía identificados con Biden y compañía, mientras que en 2024 tan sólo lo hace el 39%.