Donald Trump fue formalmente acusado por el Departamento de Justicia en relación con los documentos clasificados que encontraron en su residencia de Florida. La causa se sumó a la mochila judicial que pesa sobre la espalda del expresidente y no dejó a indiferente a nadie. En cuanto a los propios ciudadanos, una encuesta encontró que casi la mitad percibió la acusación como "motivada políticamente".

El sondeo de ABC/Ipsos fue realizado en los días posteriores a la acusación del abogado especial Jack Smith, quien también lleva adelante la investigación relacionada con los incidentes del 6 de enero del 2021. En cuanto a la seriedad de los 37 cargos, el 61 % de los norteamericanos los perciben de esa forma, un aumento de 8 puntos porcentuales comparado con las acusaciones de Alvin Bragg en abril. En los republicanos, ese aumento fue de 17 puntos.

Por otro lado, el 47 % del los 910 encuestados cree que los cargos presentados contra Trump tienen "motivaciones políticas". "Estos puntos de vista son impulsados principalmente por los republicanos, mientras que los demócratas quieren ver a Trump acusado y suspender su campaña. Curiosamente, los independientes están divididos, aproximadamente la mitad está de acuerdo con los tres sentimientos", indicaron desde la encuestadora.

Según el DOJ, Trump guardó material de alto nivel después de dejar la Casa Blanca, lo compartió indebidamente con quienes no tenían autorización y trató de bloquear cualquier intento de recuperar los documentos. Tras la acusación formal, el expresidente decidió renovar su equipo legal.

Jim Trusty y John Rowley ya no formarán parte del mencionado equipo, siendo reemplazados por Todd Blanche y "una firma que se nombrará más adelante". Ex socio de Cadwalader, Wickersham & Taft, representó anteriormente al jefe de campaña de Trump, Paul Manafort, como así a Igor Fruman, un antiguo socio de Rudy Giuliani. Se unirá a Joe Tacopina y Susan Necheles para, según informó CNN, "añadir más potencia de fuego legal a la defensa de Trump".