Las autoridades surcoereanas informaron de que Estados Unidos voló un bombardero B-1B de largo alcance sobre la península de Corea este miércoles. Se trata del primer ejercicio de bombardeo guiado con precisión con Corea del Sur en siete años.

"En el entrenamiento del miércoles participaron otros aviones de combate avanzados de Estados Unidos y Corea del Sur, así como el avión B-1B, el segundo bombardero estadounidense desplegado temporalmente sobre la Península de Corea este año", explicó AP, que fue el primer medio en informar sobre los ejercicios.

De igual manera, la actividad tuvo como objetivo demostrar el compromiso de seguridad de Estados Unidos con Corea del Sur. El Ministerio de Defensa de ese país resaltó que también pretende fortalecer la postura de defensa conjunta de ambos países aliados.

"Durante el entrenamiento, el B-1B arrojó municiones de ataque directo conjunto mientras era escoltado por aviones surcoreanos, el primer ejercicio de bombardeo de este tipo para un bombardero estadounidense desde 2017", sostuvo AP.

Los ejercicios militares entre Estados Unidos y Corea del Sur se dan en un momento de amenaza. La semana pasada se supo que Corea del Norte envió globos con bolsas repletas de basura, papel higiénico y presuntas heces de animales hacia las zonas fronterizas de Corea del Sur.

Además, el Estado Mayor Conjunto surcoreano indicó que habían observado "objetos no identificados, que se cree que son panfletos de propaganda norcoreana" en la zona fronteriza de las provincias de Gyeonggi y Gangwon.

"Los ciudadanos deben abstenerse de realizar actividades en el exterior, entrar en contacto con objetos desconocidos y reportarlos a la base militar más cercana o a la policía", señaló en un comunicado. El mando militar aseguró que las acciones de Pyongyang "claramente violan el derecho internacional y amenazan gravemente la seguridad de nuestro pueblo".