Joe Biden estuvo presente durante varios de los ataques de su perro Commander a los agentes del Servicio Secreto

Un informe publicado por Judicial Watch asegura que algunos de esos incidentes ocurrieron mientras el presidente sacaba a su pastor alemán de paseo.

Joe Biden estuvo presente durante varios de los ataques de Commander a los agentes del Servicio Secreto. Un informe publicado por Judicial Watch aseguró este viernes que algunos de estos incidentes ocurrieron mientras el presidente sacaba a su pastor alemán de paseo por los terrenos de la Casa Blanca:

Última hora: Judicial Watch recibió registros del Servicio Secreto del DHS a través de la FOIA que revelan los detalles sobre varios incidentes en los que el personal del Servicio Secreto fue mordido por el perro del Presidente Biden, a veces requiriendo atención médica.

Uno de estos ataques ocurrió el 13 de septiembre de 2023. Ese día, el presidente decidió llevar a Commander al Kennedy Garden para dar un paseo en plena noche. Y, un miembro del Servicio Secreto relató, en declaraciones recogidas por The New York Post, el incidente que tuvo con el perro:

Cuando comencé a caminar hacia el presidente para ver si necesitaba ayuda, Commander corrió entre sus piernas y me mordió el brazo izquierdo en la parte delantera de mi chaqueta. Retiré mi brazo y grité: 'No'. El presidente también le gritó [redactado] a Commander. Entonces el presidente [redactado]. Acepté y Commander me dejó acariciarlo. Pero al girar para cerrar la puerta, Commander saltó de nuevo y me mordió el brazo izquierdo por segunda vez. El presidente volvió a gritarle a Commander y le ató la correa. La chaqueta de mi traje tiene tres agujeros, uno de ellos completamente atravesado. No me atravesó la piel.

Commander atacaba mientras Biden lo sacaba de paseo en las inmediaciones de la Casa Blanca

No fue el único incidente que presenció Joe Biden ya que el presidente estuvo presente en al menos otros dos ataques que el perro protagonizó con agentes del Servicio Secreto. El primero de ellos fue el 2 de octubre de 2022 y sucedió en la entrada cerca del jardín de rosas que conecta el ala oeste con el resto de la mansión presidencial. Así lo detalló el agente en registros que salieron a la luz el pasado mes de febrero:

Me mordieron/agarraron en el antebrazo izquierdo. Commander llegó primero, dio la vuelta y me agarró del brazo izquierdo. Luego se puso de pie y volvió a bajar. Él es literalmente mi altura de pie. [El presidente Biden] entró poco después porque iba detrás de él. [Biden] entró en Palm Room y dijo: '[cita redactada]'.

Y el Kennedy Garden fue el escenario en el que Commander atacó de nuevo. Sucedió el 11 de diciembre de 2022 y ese día, al igual que las veces anteriores, Joe Biden decidió sacar a su perro a dar una vuelta, tal y como aseguran los registros:

El presidente solicitó llevar a Commander (con la correa) al Kennedy Garden. Una vez en el KG, [Biden] le quitó la correa a Commander para que corriera libre. Estuve presente para observar a [redactado] salir del Kennedy Garden para avanzar detrás de [redactado] hacia el camino sur a través de la puerta interna del jardín cuando ocurrió [el ataque].

Todos estos, y otros incidentes, provocaron la expulsión del perro de Joe Biden de la Casa Blanca en octubre del año pasado. Actualmente, no se sabe la ubicación actual del pastor alemán del presidente ya que, cuando la familia Biden expulsó al can, únicamente informaron de que "Commander no se encuentra actualmente en los jardines de la Casa Blanca".