La crisis de falta de personal policial en la ciudad de Seattle no cesa. Para tratar de sanear la situación, el Departamento de Policía anunció en su página de LinkedIn que "ahora está aceptando solicitudes de los beneficiarios de DACA" que quieran ser agentes.

Anteriormente, las personas que solicitaban puestos de oficiales de policía tenían que ser ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes. Esta normativa cambió en la página de calificaciones laborales de la oficina, que ahora indica que "un solicitante debe tener una ciudadanía de los Estados Unidos, o tener residencia permanente legal en los EEUU, o ser un beneficiario de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA)".

Los beneficiarios de DACA ahora también pueden llevar un arma

Anteriormente, también existían restricciones para que las personas beneficiarias de DACA portaran armas de fuego. Sin embargo, esta norma fue impugnada por la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) el año pasado.

Tras la impugnación, el Departamento de Justicia determinó que "la posición de la ATF" es que "los beneficiarios de DACA también pueden poseer armas de fuego y municiones incautadas como evidencia o para su decomiso si la posesión está en relación con sus deberes oficiales".

Seattle y la falta de personal policial

Seattle ha perdido más de 725 agentes de policía en los últimos cinco años, dejando a la ciudad con alrededor de 900 oficiales, el nivel de personal más bajo desde 1990.

Este no es el único cargo público que pueden ocupar los beneficiarios de DACA. A principios de este año, la Legislatura del Estado (de mayoría demócrata) aprobó una norma (SB6157) que permite que estas personas que pertenecen a la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia apliquen en puestos públicos de servicio civil.