La visita de Donald Trump a San Francisco fue sumamente rentable para el candidato republicano de facto a la Casa Blanca. En lo económico, porque el acto, organizado con ayuda del senador J.D. Vance, consiguió recaudar más de 12 millones de dólares en un santuario demócrata californiano, pero, además, por la cantidad de personas relevantes del mundo de la tecnología, el capital riesgo y las criptomonedas que consiguió reunir en una plaza progresista. Su presencia provocó algunos altercados entre sus partidarios y detractores que se acercaron al lugar para increparlo.

Las entradas, que costaban hasta 500.000 euros por pareja, agotadas

Según informa Reuters, el expresidente consiguió esa cantidad de dinero en un acto organizado por David Sacks y Chamath Palihapitiya, dos inversores de capital riesgo, que llamó la atención de inversores de Silicon Valley descontentos con la Administración Biden. Los organizadores prepararon una recepción y una cena con Trump en la mansión de los Sacks, en el barrio de Pacific Heights.

Según la agencia alemana, las entradas para el evento, que costaban hasta 500.000 dólares por pareja, se habían agotado. Así, calcularon que se recaudaron unos 12 millones de dólares, según Harmeet Dhillon, miembro del Comité Nacional Republicano, y una segunda fuente.

Importante victoria de Trump en un santuario demócrata

Estas cifras cobran aún más relevancia por el lugar donde se consiguieron. San Francisco es una ciudad fuertemente progresista, en la que Joe Biden obtuvo el 85% de los votos de la ciudad en 2020. Frente a las políticas económicas del actual Ejecutivo, cada vez son más los capitalistas de riesgo y criptoinversores locales de perfil alto han expresado su apoyo al expresidente de cara a la cita electoral de noviembre. De hecho, algunos, como Jacob Helberg, un analista de datos que votaba al Partido Demócrata hasta 2021, han donado a la campaña del expresidente más de un millón de euros cada uno.

Otro de los grandes ganadores de la noche fue el senador J.D. Vance, uno de los que más suena como vicepresidente si Trump consigue la Presidencia. El legislador, que antes vivía en San Francisco, fue clave en la organización de la recaudación de fondos y fue el enlace entre Sacks y la campaña de Trump. De hecho, el propio Sacks agradeció su labor en el discurso, según Reuters: "Todo esto empezó con J.D. Vance llamando y preguntando si podíamos organizar un evento para el presidente Trump".

En las cercanías de la mansión de Sacks, simpatizantes y detractores del expresidente protagonizaron algunos enfrentamientos tras encontrarse ambos grupos.