Negocios en China, $17 millones y sobornos de Burisma: los informantes del IRS aseguran que el DOJ impidió imputar a Hunter con delitos graves

El informante del Servicio Interno de Impuestos (IRS), Joseph Ziegler, compareció este miércoles ante la Comisión de Supervisión de la Cámara de Representantes para dar fe de los múltiples pagos por valor de $17 millones que la familia Biden recibió de entidades extranjeras entre 2014 y 2019. Junto a Ziegler también compareció el agente especial supervisor Gary Shapley, que investigó a Hunter Biden.

La información que Ziegler vino a corroborar fue presentada en parte por la investigación del representante James Comer, presidente de la Comisión, en su informe de mayo. Junto los detalles sobre los ingresos de la familia Biden, Ziegler también aportó detalles acerca de cómo su trabajo en el IRS fue obstaculizado constantemente para defender a la familia Biden.

Los pagos sobre los que Ziegler informó son aquellos que recibieron varias empresas de responsabilidad limitada a nombre de miembros de la familia Biden y asociados. Tal y como desveló Comer en su primer informe, los orígenes de estas sumas de dinero están en Rumania, Bulgaria, Ucrania y China. En estos negocios de las sociedades limitadas, Comer aseguró que existe un informe del FBI que corrobora los sobornos de Hunter Biden para favorecer sus tratos con la empresa energética ucraniana Burisma. De acuerdo con lo que presentó Comer, Hunter y las sociedades de responsabilidad limitada de la familia recibieron pagos por parte de Burisma para evitar que el fiscal general ucraniano investigara la empresa de energía.

Al margen de estos pagos que sumaron $17 millones, Ziegler y Shapley aseguraron a la Comisión de la Cámara que sus investigaciones sufrieron interferencias por parte del Departamento de Justicia de la Administración Biden para evitar que los cargos presentados contra Hunter Biden por delitos financieros fueran graves.

Los investigadores del IRS nunca recibieron este informe del FBI, de acuerdo con lo que declararon, pese a que su contenido les habría sido de gran ayuda para su trabajo. Sharpley y Ziegler señalaron que los cargos relacionados con el ejercicio fiscal de 2014 habían prescrito. Sostienen que el fiscal de Washington designado por Biden se negó a colaborar con los fiscales federales e impidió que se presentaran esos cargos.

Fue la primera vez que los informantes del IRS desvelaron públicamente su identidad. Durante la comparecencia, los representantes demócratas intentaron socavar sus alegaciones y testimonios, asegurando que no se imputó a Hunter Biden con delitos graves por disputas y disensiones entre los fiscales. Los informantes del IRS refutaron este supuesto en repetidas ocasiones durante sus intervenciones.