Francia: a pesar de tener el mayor caudal electoral, el sistema de voto por circunscripciones castiga a los conservadores

Las elecciones legislativas en Francia culminaron este domingo con un resultado que pondrá a los principales bloques y coaliciones en una situación de tensión, confusión y posiblemente ingobernabilidad. Si bien la Agrupación Nacional (RN) y sus aliados no obtuvieron el resultado que esperaban, las izquierdas del Nuevo Frente Popular (NFP) no alcanzaron tampoco mayoría y el centro presidencial Juntos (ENS) apenas logró mantener su posición, contra todo pronóstico.

Pese a esto, la izquierda en Francia interpretó los resultados como una victoria. Tanto desde el electorado como desde las formaciones políticas e incluso gran parte de la prensa nacional e internacional. La coalición NFP, liderada por La Francia Insumisa (LFI) de Mélenchon exigió desde los primeros momentos decisivos del escrutinio que su formación liderase el nuevo Gobierno francés. Sin embargo, la victoria y papel que reclama el líder de La Francia Insumisa tiene mucho nivel de rechazo, y los números obtenidos ponen esas pretensiones en duda.

La izquierda, sin mayoría y volátil

Si bien la coalición NFP se proclama como grupo parlamentario con más escaños, lo cierto es que ninguno de los partidos políticos que la conforman es uno de los dos que más escaños tiene. Esta familia política, unida por la llamada “amenaza de la extrema derecha", ya se fracturó en el pasado, cuando se unió bajo las siglas NUPES (Nouvelles Union Populaire Écologique et Sociale). El NFP ha pasado de 142 a 182 escaños en total. Los grandes ganadores dentro de la agrupación son los socialistas y los verdes, que han visto su número de escaños crecer considerablemente y ganan así fuerza en la coalición.

El partido político más radical de la formación, y con quien el centro está menos predispuesto a negociar, es LFI que no ha sumado ningún escaño más. Incluso ha llegado a perder uno, pasando de 75 representantes en la Asamblea a 74. Los socialista suben de 27 a 59 y los ecologistas de 16 a 28. Sin embargo, ninguno de estos partidos en solitario alcanza el número de escaños que obtuvo el RN.

RN, fuerza política más votada

Las izquierdas y el centro presidencial elaboraron una estrategia en las circunscripciones para hacer un cordón sanitario al RN y a sus aliados de Los Republicanos (LR) de Ciotti. En este sentido, retiraron candidaturas en función de cuál sería más interesante conservar para no dividir votos y así asegurarse que siempre había un candidato con más votos que el RN.

Sin embargo, esto no evitó que, como dato final y absoluto, RN sea el partido francés que más votos ha cosechado en estas legislativas. Yendo solo, y no en coalición, ha obtenido 8,74 millones de votos, de acuerdo con los datos del Ministerio de Interior francés. Aventaja en más de un millón y medio de votos a toda la coalición de izquierdas NFP y también a la coalición presidencial.

El sistema de circunscripciones castiga al RN

Pese a obtener más votos de manera absoluta, esto no se tradujo en más escaños para el partido de Le Pen y Bardella. El RN tan solo cosechó 125 escaños en la Asamblea Nacional, a los que se suman los 17 del grupo de republicanos de Ciotti. La coalición Juntos (ENS) obtuvo 168 con la suma de todos sus partidos y lo hizo gracias a 6,31 millones de votantes.

Frente al sistema de circunscripciones distintas, vale la pena recordar como fue el panorama electoral en Francia durante las elecciones europeos. El Frente Nacional volvió a lograr el mayor número de votos, con más del 32%. Fue entonces la fuerza política que más diputados europeos mandó a Parlamento Europeo, dado que en las elecciones de la Unión, cada país es una circunscripción única en el que todos los votos tienen le mismo peso. 

Gobernabilidad en Francia 

Que el RN haya cosechado más votos por sí solo que las coaliciones de centro y derecha es significativo en muchos aspectos. La desproporción no quiere decir que el sistema de voto francés sea deficiente o poco demográfico, pero brinda información acerca de la legitimidad de ciertos mensajes políticos y de la forma en la que el sistema permite cierta ingeniería electoral que no se ajuste al deseo de las mayorías. Es también un valor a considerar a la hora de comprender la situación política y social del país, además de algo a tener en cuenta de cara a las próximas elecciones presidenciales de 2027.