Francia: colectivos de izquierda celebran con disturbios los resultados de las elecciones

Paris, Lyon y Rennes fueron la noche del domingo el escenario de enfrentamientos entre manifestantes de la izquierda francesa y las fuerzas del orden. Los seguidores de la coalición de izquierda, el Nuevo Frente Popular (NFP), protagonizaron varios disturbios según las autoridades daban los resultados del escrutinio. 

Los actos de vandalismo se dieron pese a la interpretación optimista de los resultados electorales. El Nuevo Frente Popular logró sacar 178 escaños en la Asamblea Nacional en la segunda vuelta de las elecciones. Mientras, la Agrupación Nacional (RN por sus siglas en francés) no obtuvo el número de representantes esperados y se mantuvo a la baja como tercera coalición.

Si tras la primera vuelta hubo disturbios debido a los buenos resultados del RN, a quien se tilda de extrema derecha, los de este domingo fueron debido a la "victoria de la izquierda". Los disturbios comenzaron en los alrededores de la media noche. En París, los seguidores del NFP se congregaron en la plaza de la República y los disturbios comenzaron cuando las fuerzas del orden se emplearon en desalojar el lugar. 

Pronto, nutridos grupos de izquierda se dispersaron por las calles aledañas de París y se enfrentaron con objetos y fuegos de artificio a la Policía. Durante los disturbios también se registraron ataques contra negocios y sucursales bancarias. Muchos comerciantes ya habían previsto disturbios después del escrutinio y habían reforzado la seguridad de sus establecimientos. 

En varias imágenes grabadas se ve como la Policía carga para dispersar a los manifestantes y lanza granadas de dispersión (sting-ball grenades) así como botes de humo y gas. Los vándalos responden con pedradas, cohetes y barricadas. También se reportaron algunos fuegos que dañaron vehículos y mobiliario urbano. 

Las escenas de París se replicaron en otras ciudades importantes de Francia como Lyon en Nantes. En esta última ciudad, un policía quedó gravemente herido después de ser alcanzado por un cóctel molotov.