Tras la contundente victoria en la primera vuelta de las elecciones parlamentarias francesas del partido liderado por Marine Le Pen, Agrupación Nacional (RN), el resto de formaciones han estado buscando la manera de frenar al conservadurismo y bloquear su acceso al Gobierno. Para lograrlo, más de 200 aspirantes a la Asamblea Nacional que pertenecen a varios partidos han retirado su candidatura, con el objetivo de evitar que RN obtenga la mayoría absoluta en la segunda vuelta de las votaciones, que se celebrarán el 7 de julio.

Concretamente, según informó la Agencia EFE, 218 candidatos renunciaron. Entre ellos, muchos de Juntos por la República, formación liderada por el presidente Emmanuel Macron, quien, de este modo, ha cedido a las demandas de la coalición de extrema izquierda Nuevo Frente Popular de Jean-Luc Mélenchon para obstaculizar al partido de Le Pen y a su joven aspirante a primer ministro, Jordan Bardella (28 años).

En la primera vuelta de las elecciones parlamentarias, el RN casi duplicó sus números respecto a los que obtuvo en 2022. En esta ocasión, Le Pen ha conseguido cerca del 34% de los votos, por el 18,7% que logró en las anteriores elecciones, pasando de ser la tercera fuerza más votada a la primera.

La coalición de izquierda también ha mejorado su resultado, aunque en menor medida. En 2022 obtuvo el 25,7%. En 2024, el 28%, manteniendo el segundo lugar. Quien se ha desplomado ha sido Macron. Su formación ha perdido cinco puntos de unas elecciones a otras (han pasado del 25,8% al 20,8%, cayendo de la primera a la tercera posición).

El crecimiento del RN ha puesto en jaque al resto del espectro político francés. Queda reflejado en cómo dos alianzas, con diferentes ideologías y maneras de hacer política, han tenido que hallar la manera de que la derecha no alcance el Gobierno.