Los hutíes acusan a los trabajadores de oenegé capturados de formar parte de una "red de espionaje israelo-estadounidense"
Entre los detenidos se encontraban 11 empleados de Naciones Unidas.
(AFP / Voz Media) Los rebeldes hutíes en Yemen justificaron la detención de cerca de dos decenas de cooperantes mediante un comunicado en el que los acusan de espionaje.
De hecho, el grupo terrorista asegura haber desmantelado una "red de espionaje". "Una red de espionaje israelo-estadounidense fue detenida", declararon los hutíes en un comunicado publicado por su organismo de seguridad, y precisaron que los detenidos trabajaban bajo "el amparo de organizaciones internacionales y agencias de la ONU".
Naciones Unidas confirmó el viernes que 11 de sus empleados se encontraban entre los capturados y pidió su puesta en libertad. "Estamos explorando todos los canales disponibles para garantizar la liberación segura e incondicional de todos ellos lo más rápido posible", dijo entonces Stéphane Dujarric, portavoz de la ONU.
Según la organización yemení de defensa de los derechos humanos Mayyun, los secuestrados el pasado jueves fueron al menos 18 yemeníes.
Las detenciones fueron "simultáneas", según la oenegé, y tuvieron lugar en Saná, la capital, y las ciudades de Hodeida, Amran y Saada, bastión tradicional de los rebeldes.
Estados Unidos comenzó a atacar objetivos hutíes en Yemen en enero, en respuesta a los constantes ataques del grupo a embarcaciones en el mar Rojo. Los hutíes aseguran que comenzaron las ofensivas cuando inició la Guerra en Gaza para defender la causa palestina, aunque tras estas intenciones algunos analistas divisan un intento de ganar legitimidad dentro de su prolongada guerra civil.