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¿Puede Javier Milei ganar en primera vuelta? Lo que hay que saber sobre las elecciones en Argentina

El economista libertario asoma primero en las encuestas mientras Sergio Massa y Patricia Bullrich se disputan el segundo lugar.

El candidato presidencial argentino Javier Milei habla en un estrado delante de una gigantografía con su nombre y el año 2023.

Javier Milei en el cierre de su campaña para las elecciones presidenciales de Argentina. (Cordon Press)

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Argentina elige presidente el domingo 22 de octubre y todas las miradas están puestas en Javier Milei. El economista libertario fue el candidato más votado en las elecciones primarias y ahora tiene la mira puesta en aumentar su cantidad de votos para evitar una segunda vuelta. Sus rivales directos, el peronista Sergio Massa y la centroderechista Patricia Bullrich, se disputan el segundo puesto esperando provocar otra votación en noviembre.

En agosto tuvieron lugar las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en las que los votantes eligieron a los candidatos que pasaron a las generales. Aunque no definieron nada, son vistas como la encuesta más certera de cara a octubre. En aquella oportunidad, casi imprimiendo la predicción de la vicepresidente Cristina Kirchner, Milei sorprendió a todos y se quedó con el primer puesto, obteniendo el 29 % de los votos.

Muy cerca quedó Bullrich, la candidata del expresidente Mauricio Macri. La exministra de seguridad derrotó en su interna a Horacio Rodríguez Larreta y su espacio (Juntos por el Cambio) totalizó un 28 % de los votos sumando lo obtenido por los dos competidores. El podio lo completó Sergio Massa, firmando la peor elección en la historia del peronismo con un 27 % de los votos. El actual ministro de Economía ya dijo que "un partido amistoso no se juega que uno oficial", dando a entender que explotará al máximo el famoso "aparato peronista" para estas elecciones.

Contrario a lo que pronosticaban los encuestadores, Kirchner había dicho meses atrás que sería una elección de tercios, en donde no importaba "el techo", sino "el piso", dado que este define quién entra y quien no entra a una potencial segunda vuelta.

¿Cómo se vota en Argentina?

El país sudamericano tiene el siguiente sistema electoral: primero llegan las mencionadas PASO, donde los candidatos deben pasar el 1,5% para avanzar a las generales (22 de octubre). Una vez allí, hay dos formas de ganar en primera vuelta, obteniendo más del 45% de los votos o llegando al 40% con una diferencia de más de diez puntos porcentuales con el inmediato perseguidor. En cualquiera de esos dos escenarios, quien lidere se convierte en el presidente electo.

De no ser así, y este es el escenario más probable, los dos candidatos más votados se medirán en una segunda vuelta programada para el 19 de noviembre.

Milei quiere cantar victoria el domingo

El economista se llenó de entusiasmo en el cierre de campaña que protagonizó en el Movistar Arena de Buenos Aires, donde entró como toda una estrella de rock. Llegó al escenario atravesando a sus simpatizantes y luego se animó a recitar una parte de su canción insignia, Panic Show. Su objetivo para el domingo es claro: evitar una segunda vuelta. El objetivo no es sencillo, dado que tendría que subir 11 puntos con respecto a las elecciones de agosto, pero es algo que no ven imposible desde La Libertad Avanza, su partido político.

Su campaña tiene dos apuestas para superar el 40 % de los votos: capturar una mayoría entre quienes no fueron a votar en agosto y mejorar la fiscalización. En cuanto al primer punto, la participación en las primarias fue del 69 % y analistas políticos estiman que será de un 75 % el domingo. La campaña de Milei calcula que 3 de cada 4 nuevos votantes irán a parar a sus filas, impulsando potencialmente sus números en todos el país.

La segunda apuesta tiene que ver con aumentar la cantidad de soldados que defiendan sus votos. En Argentina es muy común que cada partido político aporte fiscales propios en cada una de las mesas de votación, para garantizar que ninguna boleta se escape accidentalmente de la urna. Para ello, planea pasar de los 30.000 fiscales que tuvo en las primarias a 100.000, asegurándose así que sus votos estén bien cuidados.

La carrera por el segundo puesto: Bullrich y Massa

Recordando la premonición de Kirchner, la clave de las elecciones estarán en el "piso", es decir, lo más importante será no quedar muy abajo para poder ingresar a una más que probable segunda vuelta con Milei. Aquí es precisamente en donde conviven Sergio Massa y Patricia Bullrich, pero resulta que solo hay una plaza disponible.

Por lo menos en la previa, el peronista tiene más para crecer que la candidata de Macri. Resulta que el peronismo tiene la costumbre de mejorar su performance entre las primarias y las generales, especialmente en el norte del país y en la Provincia de Buenos Aires, la madre de todas las batallas. Es el distrito más poblado del país y un bastión peronista que solo se dieron el lujo de perder en dos oportunidades desde el regreso de la democracia en 1983.

Además, el carismático ministro de economía llevó adelante lo que localmente se conoce como el "plan platita", lo que significa apurar una serie de medidas beneficiosas en el corto plazo para la clase media y baja. Como representante del gobierno actual, en su mochila electoral tiene un país con más de 100 % de inflación interanual, una fuerte caída del poder adquisitivo y un dólar que ya pasó la barrera de los 1.000 pesos.

José Pepe Mujica, expresidente de Uruguay, analizó las elecciones en Argentina y expresó lo siguiente acerca de Massa: "Argentina es una cosa indescifrable. Es un país que tiene una mitología. ¿Cómo se explica usted, que el ministro de economía, con una inflación como tiene la Argentina, va a pelear la presidencia? ¿Sabe por qué? Porque tiene el respaldo de una cosa, que no está conforme con él pero que lo va a votar, y se llama peronismo. Ese animal existe y es una mitología que tiene el pueblo argentino".

Por otro lado, la estrategia de Patricia Bullrich es un poco diferente. En las últimas semanas de campaña se concentró en ganar el voto más moderado y de centro-izquierda, en otras palabras, los votos que obtuvo Rodríguez Larreta en las primarias. Si bien representan al mismo partido político, el votante del alcalde de Buenos Aires no es el más cercano a Bullrich en cuanto a ideología. Para revertir esta situación, la campaña anunció que, en caso de llegar a la Casa Rosada, Rodríguez Larreta sería el jefe de gabinete.

A su vez, buscará mejorar su actuación en el centro del país, concretamente en Mendoza, Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba, donde Milei se hizo inesperadamente fuerte. Por ejemplo, aunque tres de las cuatro provincias tienen o tendrán gobernadores de Juntos por el Cambio, votaron por Milei en agosto.

¿Qué dicen las encuestas?

Esta pregunta pierde un poco de seriedad dado el escenario de la primera vuelta, donde ninguna encuestadora acertó el resultado y mucho menos el primer puesto. Sin embargo, nunca está de más repasar los últimos sondeos, que según la ley local deben publicarse días antes de la elección.

En promedio, Milei encabezaría las preferencias con una intención de voto del 33,4 %. Además, tiene un piso del 27,88 % y un techo del 38,84 %, arañando en este último caso una victoria en primera vuelta.

El segundo lugar sería para Massa, quien ingresaría a una segunda vuelta con el libertario. El promedio lo ubica en 29,2 %, con un piso del 24,88 % y un techo máximo del 33,62 %.

En tercer lugar aparecería Bullrich, que promedia un 24,7 % de intención de voto, con un escenario optimista de 28,8 % y uno más pesimista del 20,54 %.

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