China flexibiliza las reglas anticovid para viajeros internacionales

La Comisión Nacional de Salud (NHC) de China anunció que flexibilizará algunas medidas que limitaban la movilización de extranjeros al país por el riesgo de la expansión del covid-19.

Luego de casi tres años de haber mantenido fuertes restricciones, el régimen chino anunció que a partir del 8 de enero se flexibilizarán los controles fronterizos, permitiendo que visitantes internacionales entren al país mostrando un resultado negativo de la prueba PCR dentro de las 48 horas antes de la salida del vuelo.

Cabe recordar que actualmente a los recién llegados a China se les pide que se sometan a exámenes de salud antes de entrar en una cuarentena de ocho días, de los cuales cinco debían ser en un centro designado u hotel y otros tres en casa.

Asimismo, se normalizará la concesión de visas, se eliminarán las restricciones sobre la cantidad de vuelos internacionales que pueden ingresar al país y el número de pasajeros que podían viajar en cada aeronave. Sin embargo, se mantendrá la exigencia de las mascarillas durante los viajes.

Rebrote sin recuento

La decisión de flexibilizar las medidas llega en un momento difícil por el aumento de infectados que hay en todo el país.

Medios locales ya han reportado que los hospitales y las funerarias se encuentran abarrotadas y que no se lleva un registro real del brote.

De hecho, hace poco un epidemiólogo llamado Wang Guiqiang admitió que actualmente solo se contabilizan las muertes por neumonía o insuficiencia respiratoria, dejando de lado todos los fallecimientos por dolencias subyacentes.

Japón reforzará controles fronterizos

Ante el anuncio de la flexibilización, Japón decidió que se protegerá con el aumento de exigencias a viajeros provenientes de China.

Según explicó Fumio Kishida, primer ministro de Japón, se empezará a solicitar prueba PCR a las personas que provengan de China y que, en caso de tener resultados positivos, se deberá permanecer en cuarentena durante siete días.

“La preocupación ha aumentado en Japón, ya que es difícil comprender el verdadero alcance de la situación (en China)”, explicó Kishida.