Los oscuros detalles detrás del caso Epstein: ¿qué tenía la caja fuerte del pederasta que el FBI “perdió”?

Corría el año 2008. Un poderoso magnate, fuertemente conectado con la élite política y cultural de EE.UU. y el mundo, es acusado de tráfico sexual en Florida desembocando en un escándalo que hasta la actualidad acarrea consecuencias. Un caso con muchas irregularidades y situaciones sin explicación que ha generado un caldo de cultivo ideal para la especulación. Esta es la historia completa de los oscuros detalles del caso de Jeffrey Epstein y las preguntas que quedaron sin resolver hasta el momento, a pesar de los documentos judiciales publicados sin edición el pasado miércoles.

¿Por qué en 2008 Epstein obtuvo un acuerdo favorable de la Fiscalía?

Todo inicia en 2005, cuando la familia de una chica de 14 años denuncia a la Policía que Epstein abusó sexualmente de la menor en su mansión en Palm Beach.

La Policía de esa ciudad empieza a investigar a Epstein y, al tiempo, surgieron varias nuevas denunciantes menores de edad que dijeron a las autoridades que el magnate las contrató para dar “masajes”, un eufemismo para relaciones sexuales.

La Policía de Palm Beach tomó la decisión de acusar a Epstein de múltiples cargos de relaciones sexuales ilícitas con menores y firma toda la documentación pertinente. Aquí comienza la primera irregularidad.

Barry Krischer, el exfiscal estatal de Palm Beach, consideró, según sus decisiones legales, que las primeras víctimas de Epstein eran prostitutas. Por ello, tomó la inusual y polémica decisión de enviar el caso a un gran jurado.

En 2006, el magnate pederasta finalmente fue arrestado luego de que el gran jurado determinara que el primer cargo penal contra Jeffrey Epstein fue el de solicitar una prostituta.

Ese cargo, relativamente menor, se produjo luego del testimonio de una de 14 años que se atrevió a declarar ante el gran jurado en 2006. Fue la única víctima que se animó a testificar.

Ese primer cargo suscitó fuertes críticas contra Krischer, especialmente entre los líderes de la Policía, por ello entra el FBI en el caso e irrumpe el nombre del exfiscal Alexander Acosta, que año más tarde consiguió un trabajo en la Administración Trump.

En 2007, mientras los fiscales federales preparaban una acusación contra Epstein, los abogados del magnate lograron que su polémico cliente lograra un acuerdo de culpabilidad estatal luego de argüir que las testigos que culpaban a su representado no eran fiables.

Entonces, en 2008, Epstein fue sentenciado a 18 meses de cárcel y a estampar su nombre en el registro de agresores sexuales de los Estados Unidos en virtud de un acuerdo secreto cuyos detalles no fueron revelados en su momento. Al final, el magnate solo pasó 13 meses tras las rejas.

Además de evitar los cargos federales, Epstein consiguió pasar la mayor parte de su condena bajo un régimen de libertad condicional que le dio la oportunidad de salir de la cárcel durante el día para ir a su oficina y luego regresar por la noche a prisión.

El caso, polémico, tomó mucha relevancia a nivel nacional y una década más tarde, en 2018, se descubre que Epstein se hizo informante del FBI y gracias a ello logró su acuerdo de favorabilidad que además exculpó a potenciales cómplices, según un amplio reportaje del diario Miami Herald que accedió a un tesoro de documentos inéditos relacionados al polémico acuerdo de Epstein con los federales.

El diario floridano también reveló que la información que Epstein le dio al FBI no fue desvelada. Es decir, todo lo que le dijo el controversial administrador de fondos de cobertura al Gobierno no fue revelado al público.

“El Herald se enteró de que, como parte del acuerdo de culpabilidad, Epstein brindó lo que el gobierno llamó una “consideración valiosa” por información no especificada que proporcionó a los investigadores federales. Si bien los documentos obtenidos por el Herald no detallan cuál era la información, el caso de crimen sexual de Epstein ocurrió justo cuando el mercado de hipotecas de alto riesgo del país colapsó, dando inicio a la crisis financiera global de 2008”, se lee en el reportaje.

Aprehensión y suicidio en 2019: ¿qué sucedió con la caja fuerte de Epstein?

Luego de salir libre en 2009, una década más tarde, Epstein fue finalmente arrestado en Nueva York por cargos federales de tráfico sexual.

La acusación oficial del 2019 dice que el magnate, entre 2002 y 2005, “explotó y abusó sexualmente de docenas de niñas menores de edad incitándolas a participar en actos sexuales con él a cambio de dinero”.

En el interín, sucedieron varias cosas de enorme relevancia. El periodista conservador Mike Cernovich inició una demanda para que se liberaran los documentos ocultos del caso, el Miami Herald se unió a dicho trámite y, de esta forma, el público obtuvo detalles sobre los crímenes del magnate, logrando una intensa presión de la opinión pública contra el Departamento de Justicia.

Tras el arresto del 2019, agentes del FBI allanaron la mansión de Epstein en 9 East 71st Street entre el 6 y 7 julio.

Los agentes federales encontraron “un gran tesoro de fotografías lascivas” de chicas jóvenes, incluidas fotografías de “al menos una niña, quien, según su abogado, era menor de edad al momento de tomarse las fotografías pertinentes”.

Asimismo, como dato fundamental, los agentes descubrieron “en una caja fuerte cerrada con llave... discos compactos con etiquetas escritas a mano que incluían lo siguiente: 'Joven [Nombre] + [Nombre]', 'Desnudos varios 1' y 'Fotos de chicas desnudas'”.

Esta caja fuerte, recoge el diario británico The Telegraph, se perdió. Muchos críticos dicen que estas cintas de grabaciones son los materiales de extorsión que tenía Epstein en su poder para persuadir o someter a sus clientes “poderosos”, como políticos, miembros de la realeza o celebridades.

En 2021, Kelly Maguire, una agente especial, declaró durante el juicio de Ghislaine Maxwell, la amante y socia cómplice de crímenes de Epstein, que la evidencia de la caja fuerte se perdió porque el FBI, en primera instancia, no tenía la orden judicial para retener los hallazgos.

Según Maguire, el FBI tomó fotografías de los artículos, pero los dejaron en la residencia y cuando volvieron al lugar allanado, cuatro días más tarde, el 11 de julio, ya no se encontraban allí.

Maguire, quien fungió miembro de un Grupo de Trabajo de Explotación Infantil y Trata de Personas del FBI, dijo que habló por teléfono con Richard Kahn, abogado de Epstein, quien trajo de vuelta los artículos en dos maletas, pero no se pudieron verificar si eran los mismos.

Cernovich, el periodista que interpeló la demanda para que el público obtuviera los detalles sobre el caso Epstein, dijo en X (Twitter) que la evidencia de esa caja fuerte era la más importante del caso y nunca se sabrá con exactitud que tenía consigo más allá de las especulaciones.

Luego, la historia ya es más conocida: Epstein fue arrestado el 6 de julio en Nueva Jersey y se suicida, según la versión oficial, el 10 de agosto, en una cárcel federal en el Centro Correccional Metropolitano (MCC) de Manhattan luego de declararse inocente de todos los cargos por tráfico sexual y después de que salieran a la luz miles de documentos sobre sus crímenes.

Algunos expertos, como el Dr. Michael Baden, arguyen que las heridas de Epstein son inusuales en un caso de ahorcamiento por suicidio tras examinar la autopsia del magnate caído en desgracia. Tampoco hay evidencia audiovisual sobre el suicidio, ya que las cámaras de la celda estaban fuera de servicio y su compañero de cuarto fue cambiado antes del suceso.

“En más de mil ahorcamientos y suicidios en las prisiones estatales de la ciudad de Nueva York durante los últimos 40 a 50 años, nadie tuvo tres fracturas”, dijo Baden al programa 60 Minutes.

Todos los detalles de la muerte del magnate, sumado a las irregularidades de la investigación, no hacen sino generar especulaciones sobre su oscuro negocio de tráfico de menores y quienes estaban involucrados.

El caso, ahora, vuelve a estar en el ojo de la tormenta luego de que el pasado miércoles se revelaran los nombres en una demanda interpuesta en 2015 por Virginia Giuffre contra Maxwell. Aquella querella, fue arreglada de forma privada entre la víctima de Epstein y la novia del pederasta.

Sin embargo, a pesar del revuelo a nivel global, los documentos no arrojan muchos detalles nuevos sobre el caso, sirviendo como nido de desinformación y también generando que se pierda de vista todas las irregularidades que hubo en el proceso y dejó a las víctimas, hasta el momento, sin justicia.