La paradoja de Nueva York: los inmigrantes de primera generación se quejan por la crisis migratoria en la Gran Manzana

Nueva York está viviendo unos momentos difíciles. No es ningún secreto que a la localidad llegaron unos 90.000 indocumentados desde la primavera pasada y que, actualmente, unos 5.000 están recibiendo la ayuda de la ciudad en forma de refugio y servicios. Y eso no está sentando bien a aquellos ciudadanos migrantes que llegaron primero a la Gran Manzana y que, ahora mismo, residen en distritos como Brooklyn.

Ellos comenzaron a protestar el domingo cuando se enteraron de que el Ayuntamiento de la ciudad había trasladado a varios migrantes varones al Centro de Recreación Sunset Park. Fue la gota que colmó el vaso ya que, para ellos, esa instalación es un elemento básico de la comunidad. Uno del que ya no pueden disfrutar y eso les frustra. Chen es una de ellas. Migrante de primera generación de China, contó a The New York Post como se sentían tanto ella como el resto de su vecinos:

Protestas de los migrantes en Nueva York

Ella es uno de los aproximadamente 300 residentes locales que se manifestaron fuera del Centro de Recreación Sunset Park. Otro de los ciudadanos que también protestó y habló con NYP fue Paul Rodríguez, un vecino de Dyker Heights que aseguró sentirse molesto con la decisión ya que su familia es una de las muchas que utilizaban las instalaciones:

Los vecinos también decidieron comenzar una recogida de firmas. La idea es presentársela al alcalde Eric Adams y a todos los funcionarios de Nueva York con el objetivo de recuperar unas instalaciones que, aseguran, no sólo utilizan los migrantes de primera generación sino varios ancianos que disfrutan de la piscina y las otras instalaciones que hay en el edificio. Así lo detalló Vincent Lu, que aseguró que "muchas personas mayores" del vecindario acuden con regularidad al Centro de Recreación Sunset Park: