El DOJ demanda a Virginia por remover a los "no ciudadanos" del padrón electoral

El Departamento de Justicia (DOJ) demandó oficialmente al estado de Virginia por supuestamente "depurar" su padrón electoral de cara a las elecciones presidenciales de noviembre. El gobernador del estado, Glenn Youngkin, aseguró que simplemente removieron de las listas a los "no ciudadanos" y criticó a la Administración Biden-Harris. 

De acuerdo con la presentación judicial realizada por Kristen Clarke, fiscal general adjunta de la División de Derechos Civiles, quien aseguró que los funcionarios estatales violaron la Ley Nacional de Registro de Votantes de 1993 (NVRA) al cuestionar la elegibilidad de los votantes demasiado cerca de las elecciones de noviembre.

“Como lo exige la Ley Nacional de Registro de Votantes, los funcionarios de todo el país deben tener en cuenta las restricciones claras e inequívocas de la ley sobre los esfuerzos sistemáticos de mantenimiento de listas que se realizan dentro de los 90 días anteriores a una elección”, señaló. 

“Al cancelar las inscripciones de votantes dentro de los 90 días previos al día de las elecciones, Virginia pone a los votantes calificados en peligro de ser eliminados de las listas y crea el riesgo de confusión para el electorado. El Congreso adoptó la restricción del período de silencio de la Ley Nacional de Inscripción de Votantes para evitar esfuerzos de último momento propensos a errores que con demasiada frecuencia privan de sus derechos a los votantes calificados”, sumó Clarke. 

La respuesta de Youngkin: "Un intento desesperado de atacar la legitimidad de las elecciones"

A principios de agosto, el gobernador Glenn Youngkin firmó una orden ejecutiva para actualizar diariamente la lista de votantes en búsqueda de irregularidades, en este caso de "no ciudadanos". 

La búsqueda consistió en comparar “la lista de personas que han sido identificadas como no ciudadanos” por el Departamento de Vehículos Motorizados del Estado “con la lista de votantes registrados existentes”. Posteriormente, los registradores locales se contactaron con los votantes en duda para informarles que estaban “pendientes de cancelación”, a menos que “afirmaran su ciudadanía” dentro de 14 días.

Youngkin se expresó tanto en las redes sociales como a través de un comunicado, asegurando que la demanda se trata de un "intento desesperado de atacar la legitimidad de las elecciones" por parte de la  Administración Biden-Harris.

"A menos de 30 días de las elecciones, el Departamento de Justicia de Biden-Harris presenta una demanda sin precedentes contra mí y contra el estado de Virginia, por aplicar adecuadamente una ley de 2006 firmada por el demócrata Tim Kaine que exige que Virginia elimine a los no ciudadanos de las listas de votantes, un proceso que comienza cuando alguien se declara no ciudadano y luego se registra para votar. Los virginianos -y los estadounidenses- verán esto exactamente como lo que es: un intento desesperado de atacar la legitimidad de las elecciones en el Commonwealth, el crisol mismo de la democracia estadounidense", redactó el gobernador en la misiva. 

"Con el apoyo de nuestro fiscal general (Jason Miyares), defenderemos estas medidas de sentido común, que estamos legalmente obligados a tomar, con todos los recursos a nuestro alcance. Las elecciones de Virginia serán seguras y justas, y no me quedaré de brazos cruzados mientras esta acción políticamente motivada intenta interferir en nuestras elecciones, punto", sentenció.