La Casa Blanca aseguró que la Universidad de Columbia se niega a ayudar a identificar a los estudiantes "pro-Hamas"

La Universidad de Columbia se niega a ayudar al Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU.a identificar a los estudiantes de una lista de individuos, que han "participado en actividades pro-Hamas" en el campus, dijo el martes la Casa Blanca.

Karoline Leavitt, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, dijo a los periodistas en una sesión informativa que el departamento ha reunido los nombres de otros individuos que cree que han incumplido la orden ejecutiva del presidente estadounidense Donald Trump para combatir el antisemitismo.

"Han estado usando inteligencia para identificar a individuos en los colegios y universidades de nuestra nación -en nuestros campus universitarios- que se han involucrado en tal comportamiento y actividad, y especialmente actividad ilegal", dijo Leavitt.

"No tengo datos sobre cuántas detenciones se producirán, pero sí sé que el DHS está trabajando activamente en ello", dijo. "También sé que la Universidad de Columbia ha recibido los nombres de otros individuos, que han participado en actividades pro-Hamas, y se niegan a ayudar al DHS a identificar a esos individuos en el campus".

"Como el presidente dijo muy enérgicamente en su declaración de ayer, no va a tolerar eso,", dijo. (JNS buscó comentarios de Columbia).

La afirmación de la Casa Blanca de que Columbia se niega a cooperar con la investigación del departamento se produce en medio de la controversia en curso sobre los procedimientos de deportación contra Mahmoud Khalil, un recién graduado de Columbia, que es un líder del movimiento de protesta anti-israelí en el campus de Columbia.

Al parecer, Khalil es un ciudadano argelino de ascendencia palestina que nació en Siria y entró en Estados Unidos con un visado de estudiante antes de obtener la tarjeta verde y convertirse en residente legal permanente. También está casado con una ciudadana estadounidense.

Los funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos detuvieron a Khalil el sábado, y actualmente se encuentra detenido en el centro de detención de La Salle en Jena, La.

No está claro si Khalil ha sido acusado de algún delito, lo que ha llevado a muchos demócratas y organizaciones de defensa de las libertades civiles a argumentar que sus acciones eran expresiones protegidas, en las que un residente permanente tiene derecho a participar, y que debería ser puesto en libertad.

Un juez federal ordenó el lunes que se detuviera la deportación de Khalil hasta que el tribunal ordenara lo contrario y que se celebrara una vista el miércoles.

Leavitt dio más información el martes sobre cómo podría ser el caso del gobierno contra Khalil.

"Se trata de un individuo, que organizó protestas en grupo que no sólo interrumpieron las clases en campus universitarios y acosaron a estudiantes judíos estadounidenses y hicieron que se sintieran inseguros en su propio campus universitario, sino que también distribuyeron octavillas de propaganda a favor de Hamás con el logotipo de Hamás", dijo Leavitt. "Tengo esos folletos en mi escritorio".

Leavitt también argumentó que Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, tiene autoridad para deportar a cualquiera que sea "adversario de la política exterior y de los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos."

"Mahmoud Khalil era un individuo, al que se le dio el privilegio de venir a este país para estudiar en una de las mejores universidades y colegios de nuestra nación", dijo. "Se aprovechó de esa oportunidad, de ese privilegio, poniéndose del lado de los terroristas".

El caso de Khalil puede depender de hasta qué punto un residente legal permanente, a diferencia de un ciudadano estadounidense, goza de la plena protección de la Primera Enmienda. La Ley de Inmigración y Nacionalidad de 1952 permite denegar la entrada y deportar a "cualquier extranjero" que "apoye o propugne actividades terroristas".

Ese listón es más bajo que el de la acusación penal de apoyo material al terrorismo, que prohíbe actividades más concretas que ayuden directamente a una organización terrorista extranjera designada por Estados Unidos, la recaudación de fondos para un grupo terrorista o el reclutamiento para un grupo terrorista.

Algunos gobiernos locales y el Estado de Florida han intentado utilizar las ordenanzas contra la basura para impedir la distribución de panfletos antisemitas, porque esa actividad está protegida por la Primera Enmienda.

El Comité Judío Americano declaró el martes que está "horrorizado" por las opiniones de Khalil pero que tiene derecho a un proceso legal para determinar si violó la ley.

"La ley estadounidense es clara en lo que respecta a los requisitos necesarios para justificar la deportación", declaró el AJC. "Bajo esa ley, hay una diferencia entre el discurso protegido, incluso cuando es deplorable, y las declaraciones y acciones que justifican la deportación".

"En caso de que el gobierno pruebe su caso en un procedimiento legal rápido y público, y a Khalil se le conceda el debido proceso, entonces la deportación estará plenamente justificada", añadió.

©️JNS