Estados Unidos destruye proyectiles hutíes en Yemen que se preparaban para ser lanzados contra barcos comerciales en el Mar Rojo

Un funcionario estadounidense informó que este jueves Estados Unidos destruyó múltiples proyectiles de los rebeldes hutíes que se estaban preparando para atacar barcos comerciales que pasaban por el Mar Rojo desde Yemen, según informó Fox News.

El reporte aclara que se trató de un movimiento de autodefensa que no está relacionado con el ataque con drones que impactó una base militar estadounidense en Jordania, causando la muerte de tres soldados estadounidenses y dejando a más de 40 heridos.

Asimismo, el informe subraya que el Reino Unido no participó en esta operación, sino que fue llevada a cabo unilateralmente por Estados Unidos.

Estados Unidos destruye un misil antiaéreo

El miércoles, el Comando Central informó que sus fuerzas lograron destruir un misil tierra-aire que también estaba preparado para ser lanzado desde una zona en Yemen controlada por los hutíes.

“El 31 de enero, aproximadamente a las 3:30 pm (hora de Sanaa), las fuerzas del Centcom atacaron y destruyeron un misil tierra-aire hutí preparado para ser lanzado. Las fuerzas estadounidenses identificaron el misil en áreas de Yemen controladas por los hutíes y determinaron que presentaba una amenaza inminente para los aviones estadounidenses”, indicó el comunicado.

En los últimos meses, los rebeldes hutíes, con base en Yemen, han llevado a cabo decenas de ataques contra barcos comerciales y navales en el Mar Rojo, generando importantes repercusiones en la navegación.

Ahora, los barcos tratan de evitar la zona y se desvían, generando costos adicionales y retrasos considerables. Desde principios de diciembre, se ha registrado una disminución del 40% en el número de buques que pasan por la zona, resultando en una reducción del 45% en el tonelaje de carga, según expone el reporte.

Condena internacional a los ataques hutíes

Recientemente, Estados Unidos emitió una declaración junto a más de 20 países condenando los más de 30 ataques “ilegales e imprudentes” realizados por los rebeldes hutíes desde noviembre.

La declaración destaca la violación de la Resolución 2216 del Consejo de Seguridad de la ONU y el derecho internacional por parte de aquellos que suministran armas a los hutíes para llevar a cabo estos ataques.

Entre los países que respaldan la declaración se encuentran Albania, Australia, Bahrein, Canadá, Croacia, República Checa, Dinamarca, Estonia, Alemania, Guinea-Bissau, Hungría, Italia, Kenia, Letonia, Lituania, Montenegro, Países Bajos, Nueva Zelanda, Macedonia del Norte, Polonia, República de Corea, Rumania y el Reino Unido.