La nave espacial más grande del mundo despegó este jueves desde Texas. Se trata del cuarto vuelo de prueba de la Super-Heavy Starship de Space X, el cohete espacial de 397 pies de largo diseñado por la corporación de Elon Musk y sus socios. La prueba de este jueves fue la de mayor éxito hasta la fecha.

El Super-Heavy Starship despegó a primera hora de la mañana desde Boca Chica, en la costa Este. Es el cuarto intento de SpaceX por lograr un despegue, vuelo y retorno en buenas condiciones de la nave espacial más grande de la historia jamás puesta en vuelo. Los anteriores fallaron de forma estrepitosa. Después del despegue y vuelo hasta los niveles de la baja atmósfera, la nave realizó un aterrizaje suave sobre el golfo de México.

La nave aterrizó en una plataforma prevista para ello sobre el mar. No lo hizo del todo bien, ya que se perdieron varias protecciones térmicas y se dañó un alerón durante la maniobra, según pudo informar a través de X el fundador de la compañía, Elon Musk.

Esta nave espacial tiene una potencia de propulsión equivalente a 16 millones de libras durante la primera fase de despegue. Se trata de la propulsión más potente jamás puesta en funcionamiento para un cohete espacial. La Starsip está diseñada para ser reutilizable y tiene la misión de llevar a tripulantes tanto a la Luna como a Marte. Además del cohete, está compuesta por un módulo compartimentado para pasajeros o carga.

El test de SpaceX se produce un día después de que la . El administrador de la NASA, Bill Nelson, ofreció sus congratulaciones a SpaceX por el trabajo realizado este jueves. "Estamos un paso más cerca de devolver a la humanidad a la Luna a través de #Artemis; luego, mirando hacia Marte", escribió Nelson en X.