Un estudio revela que durante la pandemia aumentó la tasa de recetas médicas de antipsicóticos para la demencia

La investigación combinó datos de seis países: Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Corea del Sur.

Un nuevo estudio reveló que la tasa de prescripción de medicamentos antipsicóticos subió de forma sustancial entre las personas con demencia durante los primeros meses de la pandemia, y se mantuvieron altas durante 2021.

La revista JAMA Psychiatry compartió que la investigación se enfocó en los datos de más de 857.000 personas diagnosticadas con demencia en seis países: Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Corea del Sur, y en cada uno de ellos aumentó la cantidad de recetas de antipsicóticos, siendo Corea del Sur y Reino Unido los países que presentaron un aumento más sustancial.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores utilizaron las bases de datos de los países anteriormente mencionados desde el año 2016 hasta 2021, identificaron al total de personas diagnosticadas con demencia y las tasas de prescripción médica.

“Los principales resultados fueron la incidencia anual y mensual del diagnóstico de demencia y la prevalencia de personas que viven con demencia a las que se les recetaron fármacos antipsicóticos en cada base de datos. Se utilizaron análisis de series de tiempo interrumpido para cuantificar los cambios en las tasas de prescripción antes y después de la introducción de restricciones de covid19 en toda la población”, explicó la revista.

Si bien el estudio señala que los datos no pueden descifrar las causas específicas del aumento de estas tasas, los investigadores creen que este fenómeno se puede asociar “en parte con un deterioro en los síntomas conductuales y psicológicos de la demencia y un acceso reducido a la atención después de la introducción de restricciones de covid-19”.

Asimismo, los datos del estudio sugieren que, durante la emergencia sanitaria por el coronavirus, la atención médica de las personas con demencia se vio interrumpida.

“La carga de las necesidades insatisfechas en las personas que viven con demencia fue sustancial (…) Esta población enfrentó desafíos continuos en la atención incluso después de la fase aguda de la pandemia de covid-19”, escribieron los autores de la investigación.

La pandemia sin duda causó varios daños de salud y otro de ellos fue la forma en que se deterioró el cerebro de los adolescentes. Según un estudio de la Universidad de Stanford, el confinamiento provocó que los sesos de los jóvenes envejecieran entre tres y cuatro años.