Elon Musk decidió eliminar de Twitter la política de seguridad contra el misgendering o el deadnaming, dos prácticas dirigidas a las personas transgénero o pertenecientes a la comunidad LGBT. Una política que implantó la anterior ejecutiva en 2018.
Eso sí, el propietario de Twitter advertirá a aquellos usuarios que se extralimiten y violen las políticas contra el odio. El misgendering consiste en referirse a un trans por otro sexo intencionadamente. Mientras que el deadnaming implica llamar a una persona que se sometió a un cambio de sexo por su nombre de nacimiento.
Con la decisión tomada por Musk, ahora podremos decirle a un trans que es un hombre o una mujer -dependiendo del cambio de sexo por el que optase- y llamar a una persona por su nombre de nacimiento, pese a que se lo cambiase por un nombre del sexo opuesto.
Sarah Kate Ellis, presidenta y directora ejecutiva del grupo de defensa de los derechos humanos Alianza de Gays y Lesbianas contra la Difamación (GLAAD), criticó la decisión porque supone un retroceso en la seguridad de la comunidad que representa:
La decisión de Twitter de dar marcha atrás de forma encubierta en su política es el último ejemplo de lo insegura que es la empresa tanto para los usuarios como para los anunciantes. Esta decisión de hacer retroceder la seguridad LGBT aleja a Twitter aún más de TikTok, Pinterest y Meta, que mantienen políticas similares para proteger a sus usuarios transgénero en un momento en que la retórica anti transgénero en línea está llevando a la discriminación y la violencia en el mundo real.
Twitter’s decision to covertly roll back its longtime policy is the latest example of just how unsafe the company is for users and advertisers alike. https://t.co/ChR1aQRf95
— Sarah Kate Ellis (@sarahkateellis) April 18, 2023
