El Centro de Estudios de Inmigración reveló que los inmigrantes ilegales en Texas tienen tasas de delincuencia mucho más altas que las señaladas en diversos informes que "clasifican erróneamente como nativos, a un número significativo de delincuentes que luego son identificados como ilegales".
Con información del 2021, la organización contradice a las investigaciones del Cato Institute o de la revista The Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) donde se hace un "mal uso" de los datos del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS), ya que "se puede tardar años en identificar a los convictos como inmigrantes ilegales mientras están bajo custodia":
Los estudios que pretenden mostrar bajas tasas de delincuencia de inmigrantes ilegales en Texas no tienen en cuenta el hecho de que los inmigrantes ilegales no siempre son identificados inmediatamente después de su arresto. En muchos casos, los inmigrantes ilegales son identificados solo después de ser encarcelados. Si bien las afirmaciones sólidas sobre la criminalidad general de los inmigrantes ilegales no son posibles con los datos actuales, investigaciones anteriores lo han subestimado sustancialmente.
Identificar a los ilegales
El Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas envía las huellas dactilares de los delincuentes al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para determinar su estatus migratorio -cuando estos son arrestados en el estado-. Los ilegales que hayan tenido encuentros con funcionarios federales de inmigración, ya sea en la frontera o durante un arresto previo, serán identificados por el DHS y luego catalogados como ilegales en los datos del DPS.
Sin embargo, el estatus migratorio de una parte significativa de los inmigrantes arrestados en Texas no puede ser verificado por este sistema, ya que no son identificados por los funcionarios de inmigración. Por lo tanto, el Departamento de Justicia Criminal de Texas (DCJ) continúa investigando el estatus migratorio de los delincuentes mientras están encarcelados.
Tasa de homicidios un 30% más alta
Los datos del DPS interpretados por el Centro de Estudios de Inmigración sugieren que los inmigrantes ilegales en Texas son condenados por homicidio y agresión sexual en tasas más altas que el promedio estatal. Sin embargo, persisten las dudas en lo que respecta a delitos menores.
En 2012, Texas registró 3 condenas de homicidio por cada 100.000 habitantes. La tasa entre los inmigrantes ilegales era de un 3,9 por cada 100.000 personas (un 30% más alta). De hecho, los ilegales mostraron una tasa más alta de homicidios en casi todos los años (desde 2012 hasta 2019).
En el caso de agresión sexual se repite la tendencia, pero con un incremento, la tasa entre los inmigrantes ilegales es aproximadamente el doble que la de la población general del estado, con todo y estando algunos de ellos aun sin identificar.
