Sin duda, la albiceleste ha sido protagonista del fútbol mundial en la última década. Vuelve a cumplir el equipo de Lionel Scaloni, que llegó a Qatar 2022 como uno de los candidatos, con un invicto memorable y durante el Mundial ha ido de menos a más.
Argentina ha jugado 18 Mundiales y ésta será su sexta final. Fue el primer subcampeón del mundo en 1930 al perder ante el conjunto local, Uruguay. Tuvieron que pasar 48 años para que Argentina regresara a la gloria y fue en 1978, en su casa, cuando venció 2-1 a Países Bajos con Mario Alberto Kempes como protagonista.
Ocho años después, en México 86, Argentina levantó su segunda Copa de Mundo con el genio de Diego Armando Maradona (y uno de sus goles tan polémico que, hasta el día de hoy, muchos lo consideran como mano) derrotando a la selección de Alemania. La albiceleste volvió a la final cuatro años después, en Italia, y Maradona seguía en la élite del fútbol repitiendo la final contra los teutones, pero en este escenario los rivales de Argentina se llevaron el triunfo.
Ahora, ganar la Copa del Mundo está en manos de Argentina y de lo que pueda hacer el próximo domingo ante su rival en la final. Lionel Messi se coronaría como uno de los más grandes futbolistas de todos los tiempos (y no es que no lo sea ya) pero ganar el Mundial sería la cereza del pastel. Inclusive, podría emular a Maradona y a Kempes como los capitanes argentinos que levantaron la Copa del Mundo en Argentina 1978 y México 1986, y entrar en los anales de la historia de la mano del Rey Pelé.
1986: última vez en la que Argentina se alzó con la victoria en un Mundial
Cuando Argentina ganó su último Mundial en 1986, el mundo era totalmente distinto a lo que conocemos ahora. La tecnología no había llegado a las canchas, las zapatillas, ni a los balones. Esa tecnología que ahora hace que exista el VAR o que las reglas del fútbol hayan evolucionado; desde el peso y la configuración del balón que se adaptan al mejor desempeño de los atletas.
Las figuras del fútbol de la actualidad no habían nacido o eran muy pequeños: Cristiano Ronaldo tenía un año de edad, mientras que Lionel Messi aún no llegaba al mundo por no hablar del extraordinario Kylian Mbappé.
Y no sólo eso, en el mundo deportivo en todos sus ámbitos, surgían estrellas, equipos y otros estaban en su apogeo. Por ejemplo, en Estados Unidos, en la NBA, nacía la leyenda Michael Jordan, quien jugaba su segunda temporada con los Chicago Bulls.
La Copa de Europa, que ahora conocemos como Champions League, la ganó el Steaua Bucarest tras vencer al Barcelona.
En el deporte mexicano, estaba marcando época además de ser sede de aquel Mundial, tenía personajes triunfando a nivel internacional como Hugo Sánchez en el Real Madrid; Fernando Valenzuela en los Dodgers en la MLB; y, Julio César Chávez sumaba más de 50 peleas invicto.
¿Se repetirá la historia y Argentina ganará su tercera Copa del Mundo o se volverá a convertir en Subcampeón de la máxima justa del fútbol internacional? Eso lo sabremos el domingo y, en este deporte que tantos amamos, la suerte no está echada porque, si algo hemos aprendido en este mundial, es que quienes pensábamos que eran invencibles fueron vencidos y quienes creímos débiles nos han dado sorpresas inimaginables.
