Mundial de Qatar: una marca danesa se 'invisibiliza' para hacer visibles a los miles de trabajadores muertos durante las obras

"Apoyamos a la Selección en todo momento, pero eso no es lo mismo que apoyar a Qatar como país anfitrión".

La marca Hummel desaparece del Mundial de fútbol de Qatar que se celebrará en apenas dos meses. La firma deportiva, que viste a la Selección de Fútbol de Dinamarca, decidió eliminar su logo de las camisetas danesas como símbolo de protesta contra el régimen catarí y las condiciones laborales a las que someten a los obreros.

"Esta camiseta lleva consigo un mensaje. No queremos ser visibles durante un torneo que costó la vida a miles de personas. Apoyamos a la selección danesa en todo momento, pero eso no es lo mismo que apoyar a Qatar como país anfitrión", explicó Hummel en sus redes sociales.

"Compromiso de proteger la salud y seguridad de los trabajadores"

El Comité Supremo de Qatar 2022 manifestó su "compromiso" con los trabajadores y rechazó que se les acuse de no respetar los derechos humanos:

Rebatimos la afirmación de Hummel de que este torneo le costó la vida a miles de personas. Además, rechazamos de todo corazón que se trivialice nuestro auténtico compromiso de proteger la salud y la seguridad de los 30.000 trabajadores que construyeron los estadios y otros proyectos del Mundial. Ese mismo compromiso se extiende ahora a 150.000 trabajadores de diversos servicios del torneo y a 40.000 trabajadores del sector de la hostelería.

De este modo, el comité catarí organizador del Mundial respondió a la firma deportiva y aseguró que trabajó junto con el régimen catarí para garantizar que el torneo deje un buen legado:

Ese legado contribuyó a la realización de importantes reformas en el sistema laboral, promulgando leyes que protegen los derechos de los trabajadores y garantizando la mejora de sus condiciones de vida.

6.500 obreros muertos

Diez años después de que la Federación Internacional de Fútbol Asociación​ (FIFA) escogiese a Qatar para la celebración del Mundial de Fútbol de 2022, el régimen de Doha se preparó para albergar uno de los eventos deportivos más importantes del planeta.

Según un informe del periódico The Guardian, hasta el momento 6.500 obreros no cataríes murieron construyendo los estadios e infraestructuras necesarias para el torneo. Concretamente, son inmigrantes procedentes de India, Bangladés, Sri Lanka, Pakistán y Nepal.

Los trabajadores fueron sometidos a condiciones de trabajo duras, con labores a gran altura y con altas temperaturas a pleno sol. De acuerdo con el registro oficial, los obreros fallecieron por "muerte natural" (insuficiencia cardiaca o respiratoria), lesiones de caídas a grandes alturas y asfixias. Por otro lado, del total de muertos de origen indio, bangladesí y nepalí, el 7% fue por suicidio.

No es la primera voz contra Qatar 2022

Debido a que el Mundial se celebra en Qatar, el calendario futbolístico se vio alterado. Es la primera vez que el torneo se celebra entre noviembre y diciembre, cuando siempre se disputa entre junio y julio.

La influencia del régimen catarí para acoger el torneo despertó numerosas reacciones en contra suya. Hummel no es el primero que se posiciona en contra de la celebración del Mundial en Qatar. El comediante y artista noruego Rasmus Wold reflejó con su canción Never Mind the Slavery (No Importa la Esclavitud) sus críticas al Mundial y a la FIFA.

La selección noruega de fútbol exhibió camisetas con el lema "Human Rights on and off the Pitch" ("Derechos Humanos dentro y fuera de los estadios") como protesta contra las condiciones laborales de los trabajadores en Qatar.

Qatar
El futbolista noruego Erling Haaland (Twitter: @ataquefutbolero)